Guerra pide paso para los jóvenes, pero señala que con ello no anuncia su retirada

Alfonso Guerra considera que el PSOE debe dar paso a la gente joven y renovarse, aunque con la advertencia de que con ello no anuncia su retirada. El vicesecretario general socialista hizo est afirmación durante una cena multitudinaria a la que asistió la noche del martes en La Coruña. El acto estaba convocado como una celebración interna de los resultados obtenidos por los socialistas de la comarca de La Coruña, que por vez primera dan al PSOE la mayoría absoluta en la Diputación coruñesa, pero entre el millar de militantes estaban importantes socialistas de toda la región.

Entre los asistentes se encontraban, entre otros, el secretario general de los socialistas gallegos, Antolín Sánchez Presedo; el secretario de Acción Institucíonal del PSOE, Abel Caballero; el ex presidente gallego, Fernando González Laxe, y los alcaldes socialistas de La Coruña, Vigo y Orense.Guerra, quien llegó al hotel donde se celebró la cena acompañado por su hijo y había pasado la tarde en el chalé del alcalde coruñés, Francisco Vázquez, en compañía de Abel Caballero, del presidente de la Diputación y del gobernador civil, se negó a hacer declaraciones a los medios de comunicación. Los periodistas fueron obligados a abandonar el lugar al inicio del acto.

El vicesecretario del PSOE, quien fue calificado por Francisco Vázquez como símbolo de la unión del partido y la rosa del socialismo, pronunció a los postres un largo discurso de contenido fundamentalmente doctrinario e ideológico en el que señaló que el PSOE debe combinar el pragmatismo con los ideales, y no agotarse todo en la praxis.

En varios momentos se refirió también a la necesidad de cerrar filas en torno a un partido en el que hay a la vez disciplina y libertad, dijo.

Guerra calificó como falsedad que el PSOE no haya hecho aportaciones ideológicas al socialismo y dijo que las han hecho desde Jaime Vera hasta Felipe González. El ex vicepresidente del Gobierno se consideró miembro de un grupo generacional ya veterano en el PSOE, a lo que añadió que ha~brá que dar paso a nueva gente y renovarse. Aunque ello, precisó, no es el anuncio de ninguna retirada.

El número dos del PSOE, quien se despidió de cada uno de los asistentes con un apretónde manos o un beso, se refirió al comentario del secretario de los socialistas gallegos, que había dicho que Guerra tiene cuerda para rato. "¿Y quién me la va a darT', apostilló el vicesecretario general.