Los fiscales de la Audiencia Nacional piden a su jefe que eleve las penas para Amedo

Los fiscales de la Audiencia Nacional han sugerido a su jefe, José Aranda, que endurezca la petición de penas para los policías José Amedo y Michel Domínguez por razones técnicas. Estos fiscales consideran de forma unánime que jurídicamente no es sostenible calificar como una acción debe ser tipificado como cinco delitos de asesinato frustrado, según la práctica habitual de la fiscalía recogida en las sentencias de la citada Audiencia. En el caso de que el fiscal jefe acepte esa sugerencia, la petición de pena se vería incrementada en 65 años.

Las acusaciones formuladas en la actualidad por la fiscalía contra Amedo y Domínguez establecen el atentado al bar Batxoki, en el que cinco personas resultaron heridas, como una acción penal única por la que se piden 25 años de reclusión. Esta calificación fue heredada por el fiscal jefe, José Aranda, de su predecesor, Eladio Escusol, quien se apartó del criterio seguido hasta entonces en la Audiencia Nacional.Los diferentes tribunales de la Audiencia siempre han sentenciado los casos de terrorismo en función del resultado de los atentados, y no como la "acción penaal única" prevista en el artículo 71 del Código Penal. Así, por ejemplo, el atentado con coche bomba contra el Hipercor de Barcelona fue sentenciado, atendiendo al número de víctimas, como 21 delitos de asesinato y 45 delitos de lesiones.

Por lo que se refiere al caso Amedo, el criterio de los fiscales de la Audiencia Nacional es tipificar el atentado al Batxoki como cinco delitos de asesinato frustrados. Si por el atentado al presunto etarra Juan Ramón Basáñez se piden 18 años para cada uno de los policías, los cinco asesinatos frustrados del Batxoki deberían totalizar 90 años de cárcel en vez de los 25 que se piden atendiendo al criterio de la "acción penal única".

Por contra, fuentes de la Fiscalía expresaron sus dudas sobre una eventual condena por malversación de fondos o por el delito contra la Administración de Justicia derivado de las presuntas presiones de los policías sobre sus ex amantes. La malversación de entre 90.000 y 110.000 pesetas de fondos reservados es considerada insignificante sobre el montante total del dinero que se movió en este asunto. Las presiones sobre las ex mujeres de los procesados se consideran lógicas dentro del derecho a la defensa de los procesados.

Respecto a la acusación por el asesinato del prófugo Juan Carlos García Goena, las mismas fuentes indicaron la dificultad de que el Ministero Fiscal pueda modificar la calificación inicial, dado que en la misma no se solicitó la absolución sino el sobreseimiento de esa causa respecto a los policías.

Claves

La sesión del juicio duró ayer apenas un cuarto de hora, debido a la incomparecencia de los mercenarios portugueses José Paulo Figueiredo Fontes -recientemente condenado en Francia a 15 años-, Rogerio Carvalho da Silva y Antonio Ferreira Cisneros, que han acusado a Amedo y Domínguez de haberles reclutado para cometer atentados.Son precisamente los testimonios de los mercenarios portugueses y franceses recogidos por el juez Baltasar Garzón e incorporados al sumario los que se consideran claves en el resultado del juicio. Estos testimonios serán leídos en la vista como principal aportación de la prueba documental y en medios jurídicos se afirma que el tribunal concederá gran importancia a los obtenidos en presencia judicial y con todas las garantías.

La expectación en torno al juicio alcanzará hoy su punto álgido con los testimonios de Inmaculada Gómez y Blanca Balsategui, ex amantes de Amedo y Domínguez, respectivamente, que denunciaron la implicación de los policías en el asesinato de García Goena. En una reciente entrevista, Blanca Balsategui matizó algunas de sus anteriores afirmaciones relacionadas con la pertenencia de los policías a los GAL, en tanto que Inmaculada ha mantenido invariablemente las imputaciones de que Amedo llevó un artefacto explosivo a su domicilio, utilizado en el citado asesinato. El testimonio de ambas mujeres fue aplazado el pasado 17 de junio, debido a que no habían incorporado las cintas de unas escuchas telefónicas.