Chicago gana la Liga de la NBA en cinco partidos

Las estrellas también tienen su corazoncito. Las lágrimas de Michael Jordan resultaron ser las protagonistas del partido. Lloró en la cancha, cuando la bocina confirmó el resultado de 101-108. Lloró en el vestuario, arrodillado en el piso dando gracias a Dios. Por poco llora en la rueda de prensa al confesar que no tenía palabras para expresarse.

No existe momento más grande en el deporte que cuando se consigue un título de Liga. La victoria de los Bulls el miércoles frente a los Lakers desmiente varios prejuicios, entre ellos que Jordan es inhumano y que Chicago es un equipo de un solo hombre. Las lágrimas enjugaron 25 años de esfuerzo de los Bulls y siete de Jordan. Chicago es campeón de baloncesto por primera vez en su historia, al mismo tiempo que Jordan conoce el momento cumbre de su carrera. Toda una ciudad lloró de alegría.

"No sé si volveré a sentir lo mismo", declaró Jordan. "Lo que ven son las emociones de alguien que se ha esforzado. Nunca me he comportado tan apasionadamente en público. Pero no me importa. Es el momento para ser apasionado".

Jordan, con 30 puntos y 10 asistencias, volvió hacer vibrar el partido como sólo él conoce. Fue la selección unánime de 11 votantes como el jugador más valioso de la final. Pero la victoria no le perteneció exclusivamente a él. Por primera vez en la final, uno de sus compañeros sumó más puntos, Pippen, con 32. Además sumó 13 rebotes.

Todos echaron una mano. El base John Paxson, con cinco canastas y diez puntos, sentenció en cuestión de tres minutos un partido que estaba empatado en el cuarto tiempo. Decir que si Jordan o los Bulls son nada es hoy un engaño. La verdad es que todos juntos son grandes. "Lo mejor de ganar el título es que lo logramos jugando como un equipo," declaró Paxson. Chicago, con 61 victorias durante la temporada regular, un récord en el club, ha vivido una temporada verdaderamente histórica. Finalizó los play-off con un balance de 15 victorias y dos derrotas y se convirtió en el segundo equipo en ganar tres partidos de una final encancha ajena. Los Ángeles superó los 100 puntos tan solo una vez, el miércoles.

El entrenador Phil Jackson, al fomentar un juego colectivo y darle prioridad a los esquemas defensivos, proporcionó una fórmula de explotar a Jordan sin limitar a los demás. El baloncesto inaugura una nueva época, donde los equipos se arman alrededor de un base o un encestador nato. Jordan, el máximo anotador de la Liga, es tan solo el quinto en ganar un título el mismo año, el primero desde que Kareem Abdul-Jabbar lo consiguió con los Bucks de Milwakee en 1971.

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