Pöhl pretende optar a la presidencia del Fondo Monetario Internacional

JOSÉ M. MARTí FONT.Karl Otto Pöhl, que anunció recienternente su decisión de abandonar la presidencia del banco central alemán ( Bundesbank) antes de finales del mes octubre, planea presentar SU candidatura a la presidencia del Fondo Monetario Internacional (FMI), según se asegura en círculos financieros de Franefort y políticos de Bonn.

El actual presidente del Fondo Monetarl o Internacional, el francés Michel Camdessus, termina su mandato en noviembre de 1992, y la presentación de candidaturas finaliza el próximo 13 de octubre.

Las sustanciosas ofertas económicas que se supone que Pöhl ha recibido de la empresa privada, aseguran estas fuentes, no parecen compensar personalmente a este personaje singular y algo vanidoso a quien nadie ve jugando un papel de segunda fila como asesor en el mundo de las finanzas.

El hecho de planear su retirada después de la Asamblea general del Fondo Monetario en Bangkok, lo que le permitirá trabajar libremente su candidatura, apunta aún más en esta dirección.

Las posibilidades de que obtenga el cargo son múltiples. Tradicionalmente, la presidencia del FMI recae en un europeo que suele ser del Grupo de los Siete o G-7 (los siete países más ricos del mundo) o de su órbita. Camdessus fue presiclente del Banco Nacional de Francia y su predecesor fue el holandés Ono Ruding. La votación la realizan los 1.49 países miembros del organismo, aunque lo normal es que el candidato haya sido 'ya consensuado, aLinque en lit última ocasión Ruding se presentó a Ia reelección y fue derrotado por Camdessus.

Pero desde que Carridessus ostenta la presidencia, es evidente para todo el mundo que el Fondo Monetario Internacional ha perdido relieve en favor de otras instituciones como el G-7, y que en el mundo financiero internacional se echa en falta una figura de peso que relance, este organismo, alguien, se dice, que "haga el papel de ogro", rol para el que Póhl parece hecho a la medida.

Apoyo de España

Póhl contaría, por supuesto, con el apoyo del Gobierno de Bonn, pero también con el de otros países como puede ser el caso de España.

Además, las razones "personales y familiares "esgrimidas por PÓhl tras su inesperacla renuncia a seguir dirigiendo el Bundesbank, que en su momento se atribuían más a un formalismo educado y elegante destinado a evitar dejar una torrrienta detrás suyo y encubrir sus divergencias con el canciller FleImut KohI y la frustración por no poder restructurar el banco central alemán como deseaba, parecen estar realmente en el fondo de su decisión de intentar hacerse con la presidencia del FMI.

De acceder a la presidencia del Fondo Monetario Internacional, Karl Otto Pöhl se trasladaría a vivir a la capital de EEUU, Washington, desaparecería de la vida política alernana en la que tan importante apel ha jugado, y podría dedica más tiempo a su familia, sin por ello desaparecer de la escena financiera internacional.