El Liverpool, readmitido en los torneos europeos

El Liverpool vio ayer recortada en dos años su condena al exilio e las competiciones de fútbol europeas y la próxima temporada volverá a los estadios continentales con la intención de añadir un séptimo trofeo a sus vitrinas de Anfield. "Ha sufrido ya suficiente" con los seis años de ostracismo; "ha pedido que tengamos clemencia, y la hemos tenido", dijo ayer en Londres el presidente de la Unión Europea de Asociaciones de Fútbol (UEFA), el sueco Lennart Johansson, uno de los más firmes partidarios de su indulto. El máximo organismo también espera, según Reuter, contar pronto con los conjuntos israelíes.

Los clubes ingleses han vuelto esta temporada a las competiciones europeas tras dictar la UEFA una orden de expulsión indefinida, concretada en 1990 en cinco anos, a raíz de los incidentes de la final de la Copa de Europa en el estadio bruselense de Heysel, en mayo de 1985, cuando una avalancha de seguidores del Liverpool sobre los del Juventus costó 39 vidas. Al club de Anfield se le extendió entonces la sanción hasta 1993."Nadie esperaba que esto fuera a durar tanto", dijo ayer Bert Millichip, el presidente de la federación inglesa; "he hablado con gente que cree que el Liverpool ya ha sufrido bastante y que ha llegado el momento de acabar con ello". Johansson es uno de los compartían esa idea y ayer presidió la reunión de la UEFA que redujo el castigo extra.

"El Liverpool ha sufrido ya suficiente. Teníamos la capacidad de acabar con su pena. Nos ha pedido clemencia y la hemos tenido", dijo Johansson; "hemos tenido amplias discusiones sobre la situación del club y, finalmente, hemos decidido autorizar su vuelta inmediata a nuestras competiciones".

Johansson añadió: "El club inglés se ha comportado de modo que nos ha llevado a reconsiderar nuestra decisión. No ha protestado nunca. Aceptó nuestra decisión en silencio". El presidente del fútbol europeo insistió en que el levantamiento de la sanción fue adoptado por unanimidad, aunque fuentes cercanas al debate señalaron que hubo voces que abogaron por la dureza. No obstante, una vez que el delegado italiano optó por la indulgencia ya hubo poco que discutir. "Nosotros esperamos a ver qué pasaba en la Copa del Mundo con la selección y los hinchas ingleses y en Italia dejaron una imagen excelente", comentó Matarrese.

La medida fue acogida con euforia en Liverpool. Graeme Sounness, el nuevo entrenador, se mostró encantado con una medida "positiva no sólo para el fútbol inglés, sino también para el europeo".