Christian Barnard

uno de los cirujanos más conocido del mundo desde que realizó en 1967 el primer trasplante de corazón de la historia, ha anunciado su intención de abandonar su país, Suráfrica, ante la escalada de violencia de los últimos meses, y trasladar su residencia a Suiza. Barnard, que cuenta 68 años de edad, ha dejado de considerar su país un lugar seguro y adecuado para que crezca en él su hijo Armin, de dos años. El cirujano, que asegura haber contribuido desde su condición de personalidad destacada a la desaparición del apartheid, se siente frustrado por los resultados de esta larga batalla, incluyendo la incapacidad de los líderes negros para frenar los enfrentamientos violentos entre los distintos grupos políticos, quese han cobrado cientos de vidas en los últimos tiempos. "El hombre de la calle tiene la impresión de que los negros pueden obtener lo que quieran en estos días", ha declarado Barnard al diario surafricano The Start. Y ello es así, según él, "sencillamente porque no existe suficiente control". Dicho todo lo cual, el famoso cirujano ha procurado tranquilizar a sus compatriotas sobre la integridad de sus sentimientos patrióticos: "Para mí no existe otro país donde vivir como Suráfrica, y estoy dispuesto a camblar de opinión si la violencia cesa y los políticos son capaces de ofrecerme un futuro".