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"Pasen y vean"

El embajador español en Kuwait volvió ayer a una sede diplomática que "da pena y asco"

Juan Jesús Aznárez

ENVIADO ESPFCIAL, "Pasen, pasen y vean. Da pena y asco". El embajador español en Kuwait, Juan José Arbolí, llegó ayer a la capital del emirato acompañado por el secretario de la sede, Juan José Buitrago; 40 toneladas de medicinas y, alimentos; tres generadores Diesel; dos secretarias con sus esposos, y dos técnicos en desactivación de explosivos.

Tras informar de su presencia a las autoridades locales y de entregar las medicinas y dos generadores a la Media Luna kuwaití, el diplomático recorrió las dependencias de su residencia en el barrio de Tabrouk, junto con varios corresponsales españoles. "Esto es una cuadra", dijo. El hedor de alimentos en descomposición se había extendido desde hace semanas por el edificio. La vivienda del embajador era sin embargo un palacio en comparación con el estado en que quedaron otros domicilios visitados por los iraquíes.La representación diplomática española llegó a Ciudad de Kuwait en tres Hércules a media mañana tras hacer escala en Chipre y Riad. Uno de los expertos en desactivación de bombas de Interior indicó que no habían encontrado ningún explosivo. "Hemos pasado peor rato cuando sobrevolábamos las nubes negras producidas por los pozos de petróleo ardiendo que buscando las minas".

Banderas españolas

Tanto en la residencia como en la cancillería ondeaban las banderas españolas; en la primera sede, sucia y grasienta, y en el domicilio particular de Arbolí, recién planchada, había sido izada por los dueños de la residencia, que consiguieron evitar que un comandante iraquí la requisase para instalar su vivienda. Los miitares ocuparon un edificio situado enfrente."Mi misión es fomentar las desgraciadamente pobres relaciones comerciales entre España y Kuwait", dijo Juan José Arbolí. "¿Y fomentar la democracia? Eso sería inmiscuirse en los asuntos internos de una nación, aunque evidentemente España ha elegido un sistema democrático", agregó el diplomático.

También dijo que se ocuparía de investigar la situación del periodista español Antonio Castell, de la plantilla de El Observador de Barcelona y al parecer detenido por los iraquíes. En la residencia reina el desorden: cajones abiertos, camas sin hacer, cinco frigoríficos sin electricidad y semivacíos y almacenando putrefacción y un mobiliario sucio, pero sin daños importantes.

Similar paisaje es el de la cancillería. "Tendré que hacer un inventario". En la puerta de la residencia se amontonaban ayer un generador nuevo, 35 cajas con 12 botellas de agua mineral cada una, 24 cajas con comida y latas de conserva, 16 maletas y dos bultos grandes recubiertos con una lona verde.

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El embajador manifestó que un día antes de su viaje habló por teléfono con el ministro Francisco Fernández Ordóñez, quien le encomendó trabajar en la potenciación de las relaciones comerciales y en activar la presencia de empresas españolas en Kuwait.

[Por otra parte, el Reino Unido ha solicitado a España un total de 10 misiones aéreas de apoyo logístico en la zona del Golfo, dentro de los acuerdos de la UEO, para retirar parte del material británico desplazado a la zona, según fuentes de Defensa citadas por Europa Press].

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