El recuento de actas de las elecciones sindicales se encuentra bloqueado en las comisiones provinciales

Mes y medio después de finalizar los comicios sindicales, el recuento de actas se encuentra bloqueado en las comisiones provinciales de elecciones, debido al gran número de actas revocadas y que son objeto de estudio para comprobar si son o no fraudulentas. El cómputo a nivel nacional apenas alcanza la cifra media del 40%, pero la situación está más retrasada todavía en Madrid, Cataluña, Andalucía, País Valenciano y Canarias, zonas donde, en el mejor de los casos, se ha homologado el 15% de las actas registradas.

Las actas revocadas por alguno de los sindicatos son sometidas a un proceso muy minucioso. Primero se produce la verificación de los documentos que se han presentado en la correspondiente comisión provincial, comprobando si la empresa existe, si los datos de la compañía coinciden con los que obran en poder de la Seguridad Social, si el número de delegados elegidos se ajusta a los trabajadores del censo o si el representante pertenece al sindicato que figura en el acta. En caso de duda, se procede a la intervención de la Inspección de Trabajo -los inspectores, los controladores o, en el caso de Cataluña, los verificadores- y cuando se encuentran indicios de fraude se envían a los juzgados de lo social.Esa situación de bloqueo hace prever a la Administración, los sindicatos y la patronal una considerable demora de la proclamación oficial de los resultados de los comicios. El órgano encargado de ello es la Comisión Nacional de Elecciones Sindicales (CNES) y su presidente, Alvaro Espina, que es también secretario general de Empleo, ha declarado a EL PAÍS que piensa convocarla cuando tenga "información completa y una documentación exhaustiva y veraz" procedente de los distintos comités provinciales. Sus cálculos indican que ello será posible a mediados del próximo mes de febrero.

CC OO ha pedido al Ministerio de Trabajo que convoque de inmediato a la Comisión Nacional de Elecciones para fijar unos criterios que sirvan de referencia a las distintas comisiones provinciales, mientras que UGT urge una proclamación oficial de los resultados. El secretario de organización de este sindicato, Antón Saracíbar, ha realizado una ronda de entrevistas con los grupos políticos parlamentarios precisamente para comunicarles el desacuerdo de su sindicato con el retraso que lleva el cómputo de los delegados. Quería "mostrarles nuestra preocupación para que agilicen la proclamación de resultados, se convoque la CNES y se publiquen en el Boletín Oficial del Estado", como muy tarde, en el mes de febrero, explica Saracíbar.

Según el secretario confederal ugetista, el grupo parlamentario del PSOE, encabezado por su portavoz Eduardo Martín Toval, está de acuerdo con su planteamiento y le aseguró que seguirían de cerca la proclamación de resultados.

Por su parte, Celia Villalobos, diputada del Partido Popular, señaló que está muy preocupada porque no se publican los datos y culpa de ello al Ministerio de Trabajo.