Los socialistas rompen sus negociaciones con el PNV y EE para formar Gobierno

El Partido Socialista de Euskadi (PSE-PSOE) asumió ayer su paso a la oposición al Gobierno vasco, tras romperse las negociaciones con el Partido Nacionalista Vasco y Euskadiko Ezquerra para formar un Ejecutivo autonómico. La oferta de distribución de carteras para los socialistas vascos -cuatro frente a 10 ostentadas por los nacionalistas- fue juzgada muy insuficiente por los representantes del PSE-PSOE.

Los "problemas insalvables" que, a juicio de los socialistas, segaron el proceso de negociación tras la larga reunión de ayer (que concluyó alrededor de la una de la madrugada de hoy) son la gestión por el Gobierno vasco del régimen económico de la Seguridad Social, y del Instituto Nacional de Empleo, además de la participación del Ejecutivo autonómico en los órganos de decisión de las empresas públicas. "Es una interpretación del Estatuto que no podemos asumir", aseguró al término de la reunión el secretario de los socialistas vascos, Ramón Jáuregui, "porque vá más allá del propio Estatuto". "Ideológicamente no podemos admitir este tipo de espiraciones nacionalistas", añadió. Los nacionalistas afirmaron que no habían exigido a los socialistas el cumplimiento de una sola aspiración de las presentadas, como ejemplo de su "talante flexible". "Solo aspiramos a que se contemple el estatuto", afirmó José Ramón Guevara, del PNV.El otro punto que decidió la ruptura del encuentro negociador fue la oferta de carteras del bloque nacionalista a los socialistas, "una broma", según sefialaron estos últimos. EE y el PNV ostentarían 10 carteras, incluída la presidencia y la vicepresídencia. Los socialistas optarían a cuatro, con lo que se cerraría el paso a la aspiración de los representantes del PSE-PSOE de poseer una vicepresidencia con una generosa dotación económica que coordinaría la ayuda a las zonas vascas más deprimidas.

"En estas condiciones, es un gesto de ética pasar a la oposición", aseguraron al unísono Txiqui Benegas, secretarl o de organización del PSOE y José Ramón Jáuregui. "Salvo que nos llamen otra vez con un planteamiento diferente, nos vamos a la oposición", matizó Benegas, quien concluyó: "La negociación se ha planteado en unos términos ímposibles".

El PSE-PSOE llevó a la mesa de conversaciones nuevos documentos sectoriales como punto de partida para la negociación en una reunión considerada por los nacionalistas como "la última posibilidad de reconducir el proceso". Las deterioradas relaciones entre los actuales socios del Ejecutivo en funciones, PNV y PSE, hicieron que la reunión comenzara con declaraciones públícas en las que sus portavoces marcaron las distancias.

Socialistas, nacionalistas y Euskadiko Ezkerra habían iniciado la reunión ayer, poco después de las 17 horas en el palacio de Ajuria Enea.