Las petroleras ultiman con Industria el documento que les permitirá repartirse las gasolineras

Las compañías petroleras, a instancias del Ministerio de Industria y Energía, firmarán antes de fin de año el documento por el que se comprometen a la segregación de la compañía Campsa. Dicha segregación consiste en separar los activos de distribución -las gasolineras- de la red logística o de control de la red de oleoductos y su reparto entre los distribuidores. Las gasolineras, de esa forma, pasarán a depender de las distintas empresas de acuerdo a su cuota de participación en el mercado. Cuando se haya conseguido la adjudicación total, esas empresas podrán fijar ellas mismas el precio de venta al público de los combustibles que se venden en las mismas.

El documento, que se perfilaba incluso a lo largo de la mañana del pasado día 24 según fuentes del sector, será de carácter previo y en él se sentarán los principios fundamentales sobre la segregación. Es decir, las empresas accionistas de Campsa (Repsol, Cepsa, Petronor, Petromed y Ertoil) reflejarán por escrito que están de actierdo en escindir los activos de distribución para su posterior adjudicación y con el fin de operar independientemente. Estas empresas seguirán como accionistas de la Campsa que quede. Para negociaciones posteriores quedará, por tanto, la concreción de dicha adjudicación de gasolineras, la cesión de la marca Campsa a Repsol por Darte de las otras compañías y la plasmación jurídica de la, escisión, que a juicio de los propios actores de la misma genera complicaciones adicionales. Asimismo, el acuerdo tendrá que transmitirse a Bruselas para que la CE de el visto bueno.Con este documento se logra dar el paso fundamental y definitivo para un acuerdo que se persigue desde hace más de un año y que siempre se ha encontrado con impedimentos de distinto signo. Primero fueron los accionistas con menos peso (Petromed y Ertoil) los que no querían la modificación. Después el debate, que todavía perdura, se ha centrado en el reparto de gasolineras. Está previsto que las empresas se queden cort un número correspondiente a su cuota de mercado (Repsic], 57%; Cepsa, 17%; Petronor, 13%; Petromed, 7%, y Ertoil, 6%), pero ello ha de hacerse de manera equilibrada teniendo en cuenta la escala de ventas de las gasolineras y su situación.

La cesión de la marca

El número de gasolmerasque se adjudicará asciende a 3.600, quedando fuera unas 400 cuyos propietarios particularcs no quisieron firmar con Campsa el acuerdo de desmonopolización. Las 3.600 gasolineras se repartiran entre los accionistas de Campsa para que éstos puedan abanderarlas y posteriormente, fijar ellas mismas el precio de venta al público de acuerdo al sistema de precios máximos. Este es uno de los logros más significativos de la segregación.Existe el acuerdo de que Repsol se quede con la marca Campsa y sólo queda fijar el precio. Las privadas llegaron a valorarla en 60.000 millones de pesetas. Sin embargo, el precio no va a ser de gran dificultad, ya que Repsol valoraría el 4,5% que tiene que ceder al resto de empresas con el mismo rasero. El 4,5% proviene del paquete de acciones que había traspasado el Instituto Nacional de Hidrocarburos (INH) a Repsol, cifrado en cerca del 16%. Las privadas pidieron que ese 16% se disgregara a la hora de repartir las gasolineras de acuerdo a la cuota. Entre Repsol y Petionor (Repsol tiene el 89% de Petronor) suman el 11,5% y el restante 4,5% lo tienen que traspasar.