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La revuelta en Marruecos se extiende a Casablanca

La revuelta en Marruecos se extendió ayer a Casablanca a última hora de la tarde. Mientras, el Parlamento se reunía en Rabat en sesión extraordinaria y se atascaba en un debate en el transcurso del cual el Gobierno, que ha propuesto crear una comisión investigadora de los incidentes, debe explicar la situación del país y justificar su actuación. En Fez se iniciaron ayer los juicios masivos contra los manifestantes. Cerca de 100 personas comparecieron ante los tribunales.

La revuelta se extendió ayer a Casablanca. A las 19.00 (hora local), el centro de la ciudad se encontraba totalmente colapsado. Muchos comercios habían cerrado previsoramente sus puertas mientras clientes y empleados se habían quedado en el interior esperando que se calmara la situación.Las carreras entre manifestantes y policías tuvieron como principal escenario la avenida de las Reales Fuerzas Armadas, en el mismo centro de la ciudad. Se detectaron también otros incidentes en el popular barrio de Derb Sultán, donde al parecer. se produjeron algunos pequeños incendios y se escucharon disparos. Es te barrio, situado cerca del centro de Casablanca, alberga el Palacio Real. Anoche continuaban los incidentes en el centro de la población, pero la situación era confusa.

La noticia de los disturbios en Casablanca ha provocado una profunda preocupación en la clase política marroquí, ya que se recuerda con dolor la tensa situación creada con ocasión de la revuelta del pan en junio de 1981, que tuvo como epicentro esta misma ciudad. En el transcurso de aquellos incidentes se produjeron entre 600 y 1.000 víctimas, según fuentes sindicales.

Los parlamentarios marroquíes conocieron ayer los incidentes cuando se encontraban reunidos en la Cámara, sumergidos en un debate formal en el transcurso del cual el Gobierno se ha comprometido a clarificar la situación del país y a explicar su posición.

Negociaciones

El primer ministro, Azzedine Laraki, aseguró a los reunidos que hoy mismo se reanudarían las negociaciones con los sindicatos y que impulsaría una comisión mixta Gobierno-oposición para investigar los sucesos de Fez.El primer ministro leyó asimismo un memorándum sobre las idas, venidas y contactos mantenidos con los sindicatos antes del 14 de diciembre, en un intento de escuchar y atender sus reivindicaciones.

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La sesión se levantó a las ocho de la noche, tras casi tres horas de debate, en el que apenas se había escuchado la palabra víctimas y en el que nadie, o casi nadie, se había referido con claridad a los sucesos de Fez. Mañana se reanudará la sesión.

Mientras, en Fez se iniciaron ayer los primeros juicios contra manifestantes detenidos a raíz de la revuelta. Ante los jueces comparecieron dos grupos de acusados de 70 y 25 personas, respectivamente. La sentencia será conocida dentro de pocos días.

El Gobierno, en una nota oficial distribuida por la agencia MAP, acusa a los manifestantes detenidos de ser maleantes, de poseer antecedentes penales o de estar buscados por los jueces o por la policía.

Pero la represión policial y la actuación judicial afecta también a militantes y dirigentes políticos de la oposición, especialmente del partido nacionalista Istiqlal. Abdelkrim Ghallab, director del periódico en lengua árabe El Alam, portavoz junto con el rotativo L'Opinion del partido nacionalista, ha tenido que declarar durante dos horas ante la policía judicial.

El periodista y el periódico son objeto de una investigación judicial, promovida por el fiscal general de Marruecos, por las informaciones publicadas el pasado sábado referentes a los incidentes de Fez. La policía insistió en el interrogatorio en conocer, sobre todo, las fuentes de información que habían facilitado las noticias de la revuelta. Ghallab es, además de periodista, un prestigioso escritor y político marroquí, autor de varias novelas y militante desde el primer momento del Movimiento de Resistencia Nacional.

Detenciones

Otros conocidos militantes del partido nacionalista han sido asimismo convocados o arrestados por la policía en todo el país. Entre ellos destaca la detención del secretario general de la UGTM de Fez, así como el responsable del mismo sindicato en el pueblo de Bensouda, a unos 10 kilómetros de Fez. Ésta es una de las poblaciones más afectadas por las revueltas, y ha sido objeto de una especial atención por parte de las fuerzas de orden público.Bensouda se ha convertido en un inmenso campamento de militares y gendarmes, que han instalado sus tiendas a la puerta de la ciudad. No queda en Bensouda ni un solo poste telefónico o eléctrico en pie. Las aceras son un enorme lodazal sobre el que se pasea uno de los grupos más marginados de la región.

Por otra parte, se desconoce el número exacto de muertos durante los disturbios de Fez. Un rotativo socialista aseguraba ayer que en el hospital Gazani hay 46 cadáveres. La ciudad estaba ayer aparentemente en calma. Pero se teme que en cualquier momento vuelva a estallar en los suburbios la cólera popular, como ocurre cada día al atar.decer. En Rabat, el domingo por la noche se volvieron a registrar incidentes.

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