Kaspárov y Kárpov creen que la calidad del Mundial será mayor en Lyón
Los ajedrecistas soviéticos Gari Kaspárov, el campeon del mundo, de 27 años de edad, y Anatoli Kárpov, el aspirante a su título, de 39, confían en que la segunda parte de su duelo, que se reanuda hoy en el Palacio de Congresos de Lyón (Francia) con empate a seis puntos, supere en calidad a la primera, clausurada en Nueva York hace dos semanas. Kaspárov, al que la igualada tras las 24 partidas previstas le favorecería, jugará con las piezas negras a partir de las cinco de la tarde en la 13ª. El vencedor recibirá 142 millones de pesetas y un trofeo de oro y diamantes valorado en unos 100 millones.
La resistencia física y psicológica sera la clave del encuentro. Esa es la opinión casi unánime de los representantes españoles en la Olimpiada de ajedrez, en Novi Sad (Yugoslavia). "Kaspárov es mas creativo y se desenvuelve mejor en las complicaciones, pero en Nueva York rindió por debajo de sus posibilidades", expone el gran maestro José Luis Fernández. Su colega Miguel Illescas apostilla: "Las dos semanas de descanso favorecen a Kaspárov. Pero, si no las ha aprovechado para restaurar su debilidad psicológica, Kárpov será un rival muy peligroso".Muy pocos de los ajedrecistas de 106 países que juegan en Novi Sad dan como claro favorito a Kaspárov, aunque el hecho de que el empate final le favorezca sea "una importante ventaja", como dice Francisco Sánchez Guirado, el capitán del equipo masculino. La mayoría coincide con Alfonso Romero -"parecía que Kaspárov se Iba a imponer rotundamente, pero ahora lo tiene difícil"- o con el campeón de España, Jordi Magem, y el primer tablero de la selección femenina, Nieves García, que creen que Kárpov vencerá "porque Kaspárov no ha podido arrasar como pretendía y ahora está en inferioridad psicológica". Algunos, como la campeona nacional, Beatriz Alfonso, recordaron un antecedente muy significativo: "Kaspárov siempre ha ganado cuando no tenía mas remedio que hacerlo".
Alojamientos satisfactorios
Kaspárov y Kárpov se muestran "muy satisfechos" de sus alojamientos en Lyón y convencidos de que pasarán la Navidad en Francia, lo que ocurrirá si se juegan al menos 21 partidas y ambos consumen los dos descansos que les quedan. El aspirante vive en una preciosa mansión de dos pisos, con un inmenso jardín, situada en una colina de las afueras. Kaspárov ha elegido una casa más moderna, en el centro de la ciudad.Ambos están cuidadosamente atendidos por sus esposas, analistas, médicos, preparadores físicos, chóferes, cocineros, guardaespaldas, apoderados y jefes de delegación. En el caso de Kaspárov, esta función la desempeña su madre. Kárpov, consciente de que su inferioridad física ha sido decisiva en encuentros anteriores, juega al tenis todos los días y ha recibido un intensivo tratamiento experimental, basado en la inhalación de aire con poco oxígeno, para superar los problemas ocasionados por la diferencla horaria con Nueva York.
Los dos pronostican que "en la segunda parte habrá menos empates y mucha combatividad". Los analistas investigan nuevas armas. Azmaiparashvili con Georgadze, georgianos, y Dolmatov con Gurevich, rusos, trabajan para Kaspárov. Zaitsev con Podgaets, rusos, y Portisch, húngaro, con Henley, estadounidense, lo hacen para Kárpov. En los momentos de ocio retumba la impresionante voz de Portisch cantando ópera.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.