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TENIS / MASTERS MASCULINO

Emilio Sánchez no aguantó la fortaleza de Edberg

Emilio Sánchez perdió ayer en su debú en el Masters de la Asociación de Tenistas Profesionales, que disputan en Francfort: los ocho mejores jugadores del circuito. El campeón español sólo pudo oponer voluntad al juego más dotado del sueco Stefan Edberg, actual número uno mundial, antes de caer por 6-7 (4-7), 6-3 y 6-1. El futuro de Sánchez en el torneo pasa hoy por una ineludible victoria ante Pete Sampras (EE UU, 5º del mando), que ayer perdió contra su compatriota Andre Agassi (4º) por 6-4 y 6-2. En el otro partido de la jornada, Ivan Lendl (3º) se impuso al austriaco Thomas Muster (7º) por 6-3 y 6-3.

Emilio Sánchez asomó por primera vez su nariz entre los maestros del tenis mundial y apenas aguantó 53 minutos sin que se la aplastasen, Justo lo que duró su primer set contra Edberg. Fue casi una hora de ilusión que el sueco estrujó como un vaso de plástico en los 69 minutos que consumieron las dos mangas siguientes. "Intentar ganar a un número uno en un torneo de esta importancia es casi imposible. En otro sitio tal vez puedes cogerlo descuidado, pero aquí no", comentó Sánchez tras el encuentro. Apoyado en un servicio Poderoso y en soberbios restos, el español dotó al primer set de un ritmo inesperado, pues lo hizo suyo después de conseguir dos juegos en blanco ante el mejor jugador del mundo y sobre una superficie revoltosa para él como es la surpreme.Sánchez sirvió durante ese tiempo a una media de 174 kilómetros por hora, mientras que Edberg, para colocar su primer servicio, tuvo que hacerlo a sólo 148. "Jugué con agresividad al principio, pero en el segundo set me vine abajo", recordó Emilio. Así fue, el sueco llegó a ralentizar su saque en el segundo set hasta los 133 kilómetros por hora con el objetivo exclusivo de asegurar sus subidas a la red, zona en la que se mueve como pez en el agua y en la que naufraga el español. De esta manera, consiguió su primera ruptura de servicio en el segundo juego, suficiente para encarrilar la manga a su favor en sólo 40 minutos.

El tercer set consumó el definitivo hundimiento de Emilio Sánchez. "Edberg es el mejor del mundo jugando al ataque", había dicho la víspera. No se equivocó. El español se convirtió en un muñeco que el sueco, con severos y ajustados golpes a modo de hilos, comenzó a mover por la pista. Para ese momento, Emilio ya había perdido la profundidad de su servicio y decidió entregar el partido. "Cada vez juego mejor sobre este tipo de superficies, pero todavía me falta la fuerza psicológica para soportar en ellas todo un partido al mismo nivel", explicó Sánchez más tarde. No fue decisivo el que ayer fuera martes y 13, pero tampoco propició milagro alguno tan temida conjunción. La primera y única vez que el español había derrotado al sueco en sus cinco enfrentamientos anteriores fue en Bastad (Suecia), en 1986, y sobre tierra batida. El tercer set aclaró el por qué de tan pobre balance. Hasta ese momento, Emilio había sumado ocho aces. Ninguno más logró. Por ello Edberg no debió esforzarse para lograr el break en el primero y el tercer juegos. Bastó. Emilio ya estaba casi en la ducha cuando el 6-1 definitivo subió al marcador.

El español tendrá que vérselas hoy con Pete Sampras, reciente ganador del Open de Estados Unidos. De entrada, el norteamericano es el único con el que posee un cara a cara favorable. Aquella victoria se produjo en Indian Wells en 1988 y por aquel tiempo Sampras sólo tenía 17 años y sus manos eran de lana.

Saque

Ahora, de su raqueta surgen torpedos a 200 kilómetros por hora. "Mi juego es cada día más estable y hace más daño a los mejores del circuito, pero Sampras posee un talento increíble y un brazo muy bueno. En cualquier caso, le pondré muchas ganas al partido, ya que sólo me vale la victoria si quiero hacer algo aquí", comentó el número uno español, que ha decidido no participar en el próximo Campeonato de España, con la polémica con Sergi Bruguera al fondo.El joven norteamericano, sin embargo, padece problemas en la tibia de la pierna izquierda, como evidenció ayer en su derrota ante Agassi.

La jornada concluyó con la confirmación personal de Boris Becker (2) de que hoy se enfrentará al ecuatoriano Gómez en el segundo partido de la jornada, en el grupo Drysdale. Becker ha seguido un tratamiento homeopático a base de inyecciones de extracto de sangre de ternera, método muy empleado en Alemania para sanar lesiones musculares.

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