El Partido Popular y el Gobierno inician un periodo de mayor acuerdo parlamentario

El presidente nacional del PP, José María Aznar, expresó ayer públicamente su impresión de que las relaciones con el Gobierno socialista pueden ser a partir de ahora más fructíferas que en los últimos seis meses. Uno de los primeros acuerdos previsibles consistirá en establecer en la Ley Electoral una fecha rija, probablemente en mayo, para celebrar las elecciones municipales y las autonómicas en 13 comunidades.

Aznar manifestó ayer su "apoyo básico" al Gobierno en el envío de buques de la Armada al estrecho de Ormuz, pero culpó a los socialistas de que los españoles vayan a pagar "de forma más dura e intensa" que los ciudadanos de otros países de la Comunidad Europea (CE) las consecuencias del encarecimiento del petróleo. El líder del primer partido de la oposición rechazó el planteamiento gubernamental de que las medidas de ajuste económico son consecuencia exclusiva de la crisis en el golfo Pérsico.Apoyado en el ejemplo del descenso del turismo, no relacionado con la invasión de Kuwait, reprochó al Gobierno haber desperdiciado 1989 para adoptar medidas correctoras frente el crecimiento de la inflación o el descenso del ahorro familiar. "El verdadero problema es el desequilibrio como consecuencia de un modelo de crecimiento equivocado. El Gobierno tendría que haber tomado medidas de reequilibrio sin la crisis en el golfo Pérsico. Lo que ocurre es que ahora el pago es mucho más duro, mayor y más intenso para los españoles que para los ciudadanos de otros países. Nosotros vamos a mantener una reserva vigilante ante las medidas de ajuste anunciadas".

Dependencia del petróleo

El presidente del PP reprochó al Gobierno socialista que haya desaprovechado las circunstancias favorables de la economía internacional en los últimos cinco años y que España dependa todavía un 54% del petróleo en cuanto a fuentes de energía. "Nosotros", anunció "estamos dispuestos a un debate serio, sosegado y sin demagogía sobre el futuro energético de nuestro país. Cuanto más dependiente se es desde el punto de vista energético, menos independencia se tiene para tomar decisiones".

El comité ejecutivo nacional del Partido Popular, reunido el pasado lunes, puso en marcha la maquinaria electoral para preparar los comicios municipales y autonómicos de 1991. El objetivo del PP en las próximas elecciones al Parlamento vasco "es garantizar un crecimiento" de la representación e implantación del partido, según matizó ayer Aznar en una conferencia de prensa.

Éste aseguró que no ha intentado convencer a Miguel Herrero y Rodríguez de Miñón para que continue en el PP ni le ha pedido explicaciones por la actitud que ha adoptado, crítica hacia la cúpula del partido y de reflexión sobre un posible abandono de la política.

La dirección del PP aprobó la incorporación, a propuesta de Aznar, de Luis Guillermo Perinat, así como los nombramientos de Marcelino Oreja como coordinador general de la política exterior y de Abel Matutes y de Rodrigo Rato como presidente y vicepresidente, respectivamente, de la comisión de Economía.

Colaboradores de Fraga

De este modo, Aznar responde a las severas críticas que recibió por rodearse de jóvenes e inexpertos y concede protagonismo en la cúpula del partido a veteranos dirigentes que colaboraron con Manuel Fraga cuando éste encabezaba la derecha conservadora.

Aznar explicó ayer que no ha designado un tesorero ni tiene intención de hacerlo por el momento, porque no ha encontrado el candidato adecuado y porque sus funciones están siendo bien desempeñadas por el gerente, Luis Bárcenas, y el secretario general, Francisco Álvarez Cascos. El Partido Popular se encuentra sin tesorero desde que dimitió Rosendo Naseiro.