Bugno insiste en que no aspira al triunfo final
La confirmación de la nueva gran figura del ciclismo italiano al máximo nivel se concretó ayer. El humilde Gianni Bugno aún dice que no aspira a ganar el Tour, pero está contento porque ha demostrado lo que quería: brillar en la primera prueba del mundo. Y eso que no se encuentra tan bien como en el Giro, por lo que ayer fue a rueda para intentar ganar la etapa. No esperaba que se produjeran grandes diferencias en la general, como así sucedió.
Cuando se le pregunta si se considera el sucesor de Felice Gimondi, el último gran campeón transalpino, siempre dice lo mismo: "Veremos cómo va el Tour y pensaremos entonces en suceder a Gimondi". Y aunque ayer lograra un gran éxito, el mismo que consiguió Fausto Coppi en la primera llegada del Tour en esta montaña, en 1952, de nuevo aparece su modestia: "Aún queda mucha carrera. En la contra reloj [hoy], por ejemplo".Antes de la etapa, incluso antes del comienzo de los Alpes, Bugno sabía, como todos los corredores con aspiraciones, las ruedas buenas a seguir. Por eso estaba atento a Delgado e Induráin, como Lemond. Después trató de economizar lo más posible en la subida final, porque todavía no se encuentra tan bien como en el Giro. "Nunca sabes hasta dónde te pueden llegar las fuerzas", señaló. E inmediatamente, al analizar la etapa, tuvo palabras de elogio para Indurain. "Le admiro y le respeto porque es un gran campeón y ha sabido sacríficarse". Respecto a Delgado, añadió: "Es el hombre que todos esperábamos que atacara y estuve atento a seguirle. Luego no le dí relevos, porque no estaba demasiado bien". En todo caso, la colaboración de Delgado llegó hasta a llevarle un bidón de agua. Por algo Bugno tuvo también palabras de elogio para el español, al que no pudo ayudar: "Lo que ha hecho ha sido la demostración de una gran fuerza y carácter. No me ha decepcionado".
"El Tour es muy largo"
Bugno habla mientras mira una clasificación general provisional que le han colocado encima de la mesa. Como parece muy claro, no lo duda: "Los 10 minutos que lleva Pensec no serán fáciles de quitar, desde luego. El Tour es una carrera que no ha terminado aún, es muy larga y ya se ha demostrado los cambios que se producen. Primero fue Lemond en la prólogo, luego Bauer y después Alcalá y Pensec, del que no se hablaba mucho cuando tenía Bauer el maillot. Puede suceder de todo. El día 23 veremos. El año pasado se decidió todo al final entre Lemond y Fignon".
El ganador del Giro, que asombró al llevar la maglia rosa desde el primer al último día, incluso da posibilidades a su compatriota Chiappucci, que está a 1.28 minutos del líder.
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