_
_
_
_
MOTOCICLISMO

Escasa suerte de los españoles en Holanda

El Gran Premio de Holanda de motociclismo, octava prueba puntuable para el Mundial, es la gran fiesta de] campeonato. Pese a tener una destacada actuación, los pilotos españoles no fueron, como otros años, los protagonistas de la jornada, a la que asistieron cerca de 200.000 espectadores. El primer puesto del podio fue ocupado por el italiano Doriano Romboni (Honda, 125ec), con los norteamericanos John Kocinski (Yamaha, 250cc) y Kevin Schwantz (Suzuki, 500cc). Jorge Martínez Aspar (JJ-Cobas, 125cc), Carlos Cardús (Honda, 250cc) y Joan Garriga (Yamaha, 500cc) tuvieron una destacada actuación, pero no alcanzaron las metas que se proponían.

Assen, localidad holandesa conocida como la catedral del motociclismo mundial, vivió tres carreras muy distintas. Como suele ser habitual esta temporada, la prueba de 500cc fue la menos interesante de una jornada vivida apasionadamente por 200.000 espectadores, que culminaron de esta forma una semana entera de carreras.El gran premio se abrió con la competición de 125cc en la que los aficionados pudieron comprobar que la nueva generación del motociclismo italiano proporcionará grandes éxitos a ltalia. Romboni, un muchacho que ha saltado a la fama junto al jovencísimo Loris Capirossi -que ayer abandonó por rotura de su máquina-, dominó la carrera a placer. Detrás, un grupo de nueve pilotos, entre los que se encontraba Aspar, pelearon por el podio hasta la última curva.

Y como la última curva de Assen es un complicadísimo estrechamiento -la historia del motociclismo está llena de accidentes que han tenido como escenario ese chicane y la última vuelta de ese gran premio-, el final de la carrera de 125cc no pudo ser más emocionante. Allí llegaron Casanova (Honda), Stadler (JJCobas), Debbia (Aprilia), Aspair y Prein (Honda) metidos en un puño.

Una desafortunada maniobra de Stadler obligó al piloto español a irse a la hierba y perder todo el trabajo realizado durante la última vuelta encaminado a ser segundo, después de haber luchado contra motos mucho más potentes que la suya. Aspar acabó haciendo motocros y concluyó en una digna quinta posición que le permite seguir aspirando al título.

A este emocionante inicio, con paseo triunfal de Romboni, que en Nurburgring (RFA) había ganado el primer gran premio de su vida, sucedió una de las tradicionales y aburridas carreras de 500cc. La categoría reina, que ha dejado de serlo en los últimos meses, vivió una salida fulgurante del norteamericano Wayne Rainey (Yamaha), que se colocó enseguida al frente del pelotón del que destacaba, afortunadamente, la presencia del norteamericano Eddie Lawson (Yamaha), actual campeón del mundo, y del australiano Wayne Gardner (Honda), ambos sensiblemente recuperados de sus graves caídas.

Pero Holanda y su extraordinaria afición, enriquecida con motoristas procedentes de toda Europa, pudieron darse cuenta de una segunda realidad: al conocimiento del boom italiano añadieron la comprobación de que, hoy por hoy, en igualdad de condiciones, no hay otro piloto mejor que el norteamericano Kevin Schwantz. El tejano llegó desde atrás y, aunque tardó algunas vueltas en dar alcance a Rainey, acabó con su liderato en cuanto su situó detrás del líder del Mundial.

Schwantz, que hizo levantar al público de las laderas del circuito, demostró que sólo algunos errores de conducción y bastantes fallos mecánicos le han impedido hasta ahora ser el nuevo campeón del mundo. Rainey acabó siendo segundo y se mantiene al frente del campeonato. Esta vez debe destacarse una excelente actuación por parte de Joan Garriga (Yamaha), que concluyó en sexta posición por delante de Christian Sarron, Pierfrancesco Chili y Ron Haslam.

La prueba de 250cc sirvió para demostrar el gran momento de la categoría. El quinteto formado por Cardús, Cornu, Zeelemberg, los tres con Honda, y Kocinski y Cadalora, con Yamaha, hicieron las delicias del público. Todos se turnaron al frente del pelotón y esperaron a las últimas vueltas para decidir el podio.

El primer en quedar fuera de combate fue Cornu. Cardús, que peleó siempre por el primer puesto, debió de claudicar en las dos últimas vueltas al quedarse sin neumático trasero -"se trataba de un defecto de fabricación, pues le hemos descubierto un bulto en la parte izquierda", señaló el piloto de Tiana al final y aprovechó otra caída de Cadalora para subirse al segundo puesto del podio y seguir pegadito al colín de Kocinski en la clasificación general.

Clasificaciones

Clasificación de 125cc: 1. Romboni (Honda), 42 minutos 25 segundos 595 milésimas; 2. Casanova (Honda), 42.36.728; 3. Stadler (JJ-Cobas), 42.36.986; 4. Debbia (Aprilia), 42.37.206; 5. Aspar (JJCobas), 42.37.215; y 17. Hernández (Honda), 43.33.950. Mundial: 1. Prein, 90 puntos; 2. Capirossi, 83; 3. Aspar, 71; 4. Romboni, 61; y 5. Raudies, 61.

Clasificación de 250cc: 1. Kocinski (Yamaha), 43 minutos 35segundos 983 milésimas; 2. Cardús (Honda), 43.36.959; 3. Zeelemberg (Honda), 43.41.596; 4. Shimizu (Honda), 43.47.235; 5. Preining (Honda), 43.56.467; 10. Puig (Yamaha), 44.36.662; y 14. Aspar (JJ-Cobas), 44.48.202. Mundial: 1. Kocinski, 129 puntos; 2. Cardús, 107; 3. Cadalora, 93; 4. Zeelemberg, 93; y 5. Bradl, 75.

Clasificación de 500cc: 1. Schwantz (Suzuki), 45 minutos 39 segundos 074 milésimas; 2. Rainey (Yamaha), 45.39.710; 3. Lawson (Yamaha), 46.04.524; y 6. Garriga (Yamaha), 46.43.638. Mundial: 1. Rainey, 148 puntos; 2. Schwantz, 124; 3. Doohan, 86; y 6. Garriga, 57.

Un difícil Mundial

Jorge Martínez Aspar (JJ-Cobas) y Carlos Cardús (Honda se han planteado la temporada para ganar el Mundial. Se diría que Tiriti se conformaría con conseguir el subcampeo nato pero él mismo sabe que ésta puede ser su gran oportu nidad. La aparición de un sen sacional John Kocinski, que está demostrando ser tan bue no en circuito conocidos como en trazados por cono cer, puede amargarle el año a Cardús, que no cesa de pelear hasta la última vuelta en cada carrera.Aspar es de los que piensa que sólo le sirve la victoria, el título. Primero, porque él ya ha sido campeón. Segundo, porque lleva la moto que hizo campeona Alex Crivillé. Y, tercero, porque al de Alcira sólo le sirve la victoria. Pero, pese a su extraordinaria conducción -ayer era con diferencia el más rápido en los tramos con curvas-, el motor de su JJ-Cobas no cesa de traicionarle. Se rompió en Yugoslavia y le ha producido más de un disgusto en otros circuitos. Ayer su moto era con diferencia la más lenta del pelotón de cabeza.

A este problema, Aspar debe añadir dos obstáculos más: la nueva generación de pilotos encabezada por Romboni y Capirossi; y la decisión de Honda de alcanzar el título de la pequeña cilindrada.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_