Elvis
es el nombre de un seguidor de la selección italiana que lleva 20 días instalado frente a la concentración de sus ídolos. Nadie conoce su nombre auténtico, ya que él se hace llamar Elvis como homenaje a Elvis Presley. Siempre lleva consigo una bandera italiana, una reproducción en plástico de la Copa del Mundo, un reloj tricolor, y una vieja guitarra. Nació en Nápoles, pero vive en Florencia. Allí conoció a Baggio, que le procuraba entradas para ver al Fiorentina. Baggio le hacía entrar en el estadio y juntos cantaban, cerca del vestuario, canciones de los años sesenta. Durante el Mundial, sin embargo, Elvis sólo ha logrado ver a sus ídolos futbolísticos a través de los cristales del autobús que los traslada.
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