20.000, serbios exigen en Belgrado elecciones libres
Más de 20.000 serbios se congregaron ayer en la plaza de la República de Belgrado para exigir la celebración de elecciones libres antes de fin de año, primeras en más de cuatro décadas. Las autoridades serbias hicieron intentos desesperados para impedir la manifestación anticomunista, con un comunicado amenazador y un llamamiento por televisión, el martes por la noche.A pesar de ello los cinco partidos de oposición lograron celebrar un mitin. Todos los oradores -dirigentes de Partido Democrático, Partido Liberal, Partido Radical, socialdemócratas y. el nacionalista Movimiento de Renovación Serbia- pidieron elecciones, sin detellar sus programas y terminando sus discursos con el grito de: "Viva Serbia libre y democrática".
Tras el acto, de unos 40 minutos, en el que ondearon las antiguas banderas serbias y las pancartas en contra de los comunistas y de Slobodan Milosevic, quien utilizó la misma estrategia de manifestaciones callejeras para subir al poder, un larguísimo cortejo se dirigió al Parlamento serbio para entregar la petición.
Petición y desilusión
El presidente del Parlamento, Zoran Sokolovic, no recibió personalmente la petición de los cinco partidos que pide: fijar la fecha de las elecciones; convocar una mesa redonda para elaborar la ley electoral y repartir el espacio informativo para la campaña previa. "Entregamos la petición a una burócrata cualquiera que la registró en el libro de protocolo", explicó a EL PAÍS Kosta Cavoski, vicepresidente del Partido Democrático, al salir desilusionado del Parlamento. Mientras las autoridades ignoraban a los manifestantes, las voces coreaban frente al Parlamento: "Elecciones, elecciones", "abajo los comunistas".Las manifestaciones de ayer estaban dominadas por los ultranacionalistas del escritor Vuk Draskovic, pretendiente a sustituir a Slobodan Milosevic como líder nacionalista serbio. Sin embargo, el conflicto entre los diferentes grupos de ultranacionalistas fue apenas evitado, aunque hubo un intento de agresión contra Vuk Draskovic. Los activistas del Partido Demócrata, intentaban no mezclarse con los nacionalistas, para dar a entender que la coalición de cinco partidos es tan sólo una táctica de presión para que se convoquen las elecciones, y de ninguna manera una coalición electoral. "Lo importante es que el proceso democrático haya comenzado", explica el profesor de Ciencias Políticas Cedo Cipcic.
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