Posible acercamiento en el convenio del sector

José Luis Leal llega a la presidencia de la Asociación Española de Banca Privada (AEB) en un momento en el que las relaciones laborales no están en su mejor momento. Las conversaciones para la firma de un nuevo convenio se han quedado estancadas poco antes del relevo en la presidencia. Hay quien considera que es un "regalo envenenado" que recibe el nuevo presidente. Leal no lo piensa así, no sólo porque cree que hay posibilidades de reiniciar el diálogo sino porque, a fin de cuentas, el conflicto ha estallado antes de su llegada.

Pregunta. Las conversaciones del convenio están paralizadas. Se ha producido una huelga en el sector poco antes de que usted llegue a la presidencia de la patronal. ¿Qué va a hacer para desbloquear la situación?

Respuesta. Quiero ser muy prudente. Prefiero comentar poco de esto y no porque no tenga ideas al respecto sino porque hay que tratar de acercar posiciones. Creo que las posibilidades de negociación no están cerradas y merece la pena explorar las posibilidades de acercamiento entre posiciones que, en mi opinión, no están tan alejadas.

P. Pero existen unas recomen daciones del Gobierno sobre subidas salariales.

R. Creo que el Gobierno ha hecho una recomendación general a los agentes sociales que me parece razonable. El Gobierno ha dicho que hay que tener cuidado porque hay que luchar contra la inflación. Pero en la práctica hay unas discusiones sobre los convenios y lo que hay que hacer es tratar de alcanzar pactos en los que este acuerdo de lucha contra la inflación sea aceptado socialmente.

Resultante final

Es obvio que hay que tratar de reducir la inflación y los desequilibrios exteriores pero también que hay que mantener la cohesión social. La resultante final debe reflejar un equilibrio entre todos estos aspectos. Esto desde el punto de vista general.

P. Las relaciones entre la patronal bancaria y CEOE han atravesado por momentos de tensión.

R. Una asociación de empresas, cualquiera, tiene que mantener en su seno empresas que son competitivas entre sí. En cualquier asociación en cualquier país del mundo. El mantenimiento de ese equilibrio entre empresas que compiten entre sí y la búsqueda de cuáles son sus intereses comunes plantean tensiones en cualquier organización. No sólo entre la CEOE y la AEB.

Las relaciones entre AEB y CEOE son más tranquilas en un momento de expansión económica en relación a una etapa de restricciones de crédito como la actual. En un momento de limitación la banca tiene que asumir ese papel porque es, además de una empresa de servicios, un instrumento transmisor de la política monetaria del Gobierno, de cualquier Gobierno. Pero esas tensiones no obligan a pensar en una separación organizativa.