Sarrió creará un fondo para proteger sus nuevas acciones en bolsa

La compañía papelera navarra Sarrió, que el pasado 30 de marzo culminó su fusión por absorción con la firma italiana Cartiere Saffa, creará un fondo de fluctuación de activos financieros por valor de 6.000 millones de pesetas para que las acciones nuevas que han entrado como consecuencia de la fusión tengan un colchón ante posibles bajas en bolsa. Este fondo se ha formado con los beneficios atípicos originados de la venta del 50% de su filial Sarrió Tissu a los actuales socios.Estas informaciones fueron facilitadas ayer por el presidente de la empresa, Lorenzo Marco Sarrió, quien añadió que su entidad intentará colocar entre bancos españoles el 16% de su autocartera valorada entre 12.000 y 15.000 millones.

En estos momentos se barajan dos posibilidades, o bien colocarlo entre un grupo de bancos que ya anteriormente iniciaron conversaciones para adquirir participaciones encabezados por el Banco Hispano Americano u ofrecerlo a otras compañías. El presidente de Sarrió no desestimó la posibilidad de que esta empresa extranjera pudiera ser la propia Feldmuhle, firma alemana que acaba de comprar en la Bolsa de Madrid un 5% del capital de la nueva Sarrió resultante de la fusión por un valor de 2.500 millones de pesetas a razón de 1.265 pesetas la acción.

La empresa papelera, dentro de la reestructuración acordada con Saffa, ha recibido el 5,7% que Catiere Saffa -absorbida por ella- tenía en La Papelera Española y el 33,3% que tenía en Prat Cartón. El resto que está en La Papelera, podría ser adquirido por Saffa, que es uno de los principales accionistas de La papiera con algo más del 10% del capital.

Sarrió no está dispuesta a ofrecer la totalidad de este paquete a los bancos por ese mismo precio. Lorenzo Marco informó que las exenciones fiscales concedidas por la fusión con Saffa son el 65% del inmovilizado material y el 99% del fondo de comercio de Saffa que es el 86,8 1 % es decir 10. 154 millones de pesetas. Tuvo que pagar por impuestos 1.495, por lo que el ahorro fiscal se sitúa en 9.660 millones.

La nueva Sarrió tiene un capital repartido de la siguiente manera: el Grupo Saffa tiene el 35%, la familia Sarrió algo menos del 20%, Feldmuhle, un 5%, la autocartera es del 16% y un 13% se lo reparten diversos accionistas, por lo que el consejo de administración controla más del 50% del capital.

De acuerdo con el protocolo de fusión, Sarrió ha ampliado su capital en 6.792 millones de pesetas, mediante la emisión de 13.585.736 nuevas acciones, que han sido suscritas por Saffa.