La bolsa contará en 1991 con un mercado de opciones sobre un último de 10 valores

S. C.La Sociedad Rectora de la Bolsa de Madrid presentó ayer ante la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) un proyecto de mercado bursátil de productos derivados que iniciará su andadura en el primer semestre del próximo año con la contratación de opciones sobre un mínimo de 10 valores y un máximo de 15, presentes en el mercado continuo. El nuevo mercado se completará posteriormente con la contratación de opciones sobre un índice bursátil compuesto de 30 valores, opciones sobre nuevas acciones, futuros y opciones sobre futuros. La contratación de los nuevos productos se realizará mediante ordenador y con un horario paralelo al que mantiene el actual sistema de contratación electrónico.

La CNMV, una vez conocido el proyecto, desarrollará la norma jurídica y el reglamento que enmarcará la estructura del nuevo mercado y las funciones a desarrollar por cada uno de sus miembros: sociedades de valores y bolsa, agencias y creadores de mercado que facilitarán la liquidez necesaria ofreciendo posiciones de compra y venta.

Para organizar, supervisar, liquidar y compensar las primas y comisiones que se deriven de la contratación, se constituirá una sociedad independiente en la que podrán participar las bolsas interesadas, si bien, la Bolsa de Madrid tendrá en la misma el peso específico que le proporciona su posición de liderazgo entre los cuatro mercados.

El esbozo del nuevo sistema data de octubre de 1989, con el estudio encargado por la Rectora de Madrid al especialista británico Stephen Kingsley. De acuerdo con sus recomendaciones, el mercado contará con un soporte informáfico a elegir antes de un mes entre cuatro posibilidades: los sistemas utilizados en los mercados de opciones suizo y alemán (Soffex DTB), en el francés (sistema Stamp), el utilizado por ICCH Financial Markets y el diseñado por la sociedad OM -que ya actúa en España- y con la que la Bolsa de Madrid no descarta un posible acuerdo de colaboración.

El presidente de la Rectora de la Bolsa de Madrid, Pedro Guerrero, eludió concretar la inversión necesaria para llevar a buen fin el proyecto, si bien aclaró que tal inversión se recupera en tres o cuatro años. Según el máximo responsable del mercado de valores madrileño, el mercado de productos derivados tendrá un efecto favorable en la liquidez y estabilidad del mercado tradicional y será rentable por sí mismo.