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Jerry Hall, la modelo y compañera del líder de los Rolling Stones, Mick Jagger, lleva una temporada a la sombra de la mítica figura del sex-symbol de los años cincuenta y sesenta, Marilyn Monroe. La compañera de Jagger no sólo se ha estrenado recientemente como actriz en un teatro de Londres, protagonizando uno de los grandes éxitos cinematográficos de Marilyn, la obra Bus stop, sino que esta semana actuó como subastadora de un bañador de color negro que perteneció a la desaparecida actriz estadounidense. El traje de baño, que fue usado por Marilyn Monroe en 1954 en la película There's no business like show business, fue adquirido por 5.600 dólares (cerca de 725.000 pesetas) por una compañía de discos como parte del lanzamiento de Pauline Bailey, una joven de 22 años asombrosamente parecida a la fallecida actriz. Pauline Bailey lucirá el bañador en una película de vídeo que acompaña el lanzamiento de su nuevo disco, en el que se menciona a varios personajes públicos de las décadas de los cincuenta y sesenta, entre ellos la familia Kennedy. El bañador había sido donado por el cantante británico Elton John. Los beneficios de esta subasta serán destinados a la organización Rock contra la Repatriación, que intenta evitar la devolución forzosa a su país de los vietnamitas refugiados en Hong Kong.