15 personas murieron en la capital durante el mes de enero pasado a causa de intoxicación por drogas

Quince personas han muerto en Madrid durante el pasado mes de enero a causa de intoxicación por drogas, según fuentes policiales. Esta cifra supone un aumento del 66% del número de víctimas por esta circunstancia en relación con el mismo período del año pasado. En los distritos de Carabanchel y San Blas es donde ha habido más casos de muertes de drogadictos. La policía asegura que no hay nada concreto que explique este incremento.

Los cadáveres de siete de las víctimas de la heroína fueron hallados en sus respectivos domicilios, seis estaban caídos en la calle, uno fue encontrado en las escaleras de su vivienda y otro en un vagón del metro en la estación de Aluche.En el distrito de San Blas hubo un trágico fin de mes, ya que en la última semana se produjo el fallecimiento de dos jóvenes y una muchacha. La policía encontró a la chica muerta el día 23 en un descampado próximo al poblado chabolista de Los Focos; cuatro días después fue hallado muy cerca de ese lugar el cadáver de un joven de 18 años y, por último, el pasado 29 fue recogido en la calle del Algodón el cuerpo sin vida de un hombre de 22 años.

Fuentes policiales sospechan que las tres víctimas del distrito de San Blas murieron dentro de alguno de los picaderos (pisos donde se inyectan los toxicómanos) existentes en la zona, siendo posteriormente arrojados a la calle para evitar complicaciones.

Otras tres personas perecieron en el distrito de Carabanchel, donde un cuarto joven estuvo a punto de morir tras inyectarse una dosis adulterada con productos muy tóxicos.

El pasado 16 de enero, un hombre de 29 años fue descubierto sin vida dentro del retrete del bar El Segoviano, situado en la ronda de Don Bosco, en el distrito de Carabanchel. Dos días más tarde, otro varón de 27 años fue recogido cadáver junto al polideportivo de Pan Bendito. Y, por último, a primeras horas de la tarde del pasado jueves, un joven de 26 años fue hallado muerto en su domicilio de la calle de San Rufo.

Se salvó de milagro

En ocasiones, sin embargo, los drogadictos son salvados en el último momento. Eso le ocurrió a un muchacho de 21 años que el día 10 de enero compró heroína en una chabola de la calle de María Obiaga. Al salir a la calle se inyectó la dosis y cayó fulminado. Pero una vecina vio lo ocurrido y telefoneó a la policía, que trasladó al muchacho al hospital Gómez Ulla, siendo salvado por los médicos pese a que sufría una parada cardiaca.Agentes de la comisaría de Carabanchel detuvieron más tarde al matrimonio que había vendido la droga al joven. El juez ordenó el encarcelamiento de la pareja.

La víctima de menor edad fue el muchacho de 18 años encontrado el pasado 27 de enero en la avenida de Guadalajara, mientras que el de mayor edad fue un hombre de 43 años hallado en su domicilio de la calle de López de Hoyos, en el distrito de Chamartín.

Durante el año 1989 hubo en Madrid y los grandes pueblos de la periferia un total de 126 muertos por sobredosis o adulteración de sustancias estupefacientes.