El Ayuntamiento embarga las primeras 13 cuentas corrientes por impago de multas

El Ayuntamiento de Madrid ha comenzado ya a embargar cuentas corrientes a los infractores que no pagan las multas de tráfico. El pasado día 22 de enero, la Empresa Municipal de Recaudación Ejecutiva (Eresa) tramitó 13 diligencias para embargar las cuentas a nueve hombres y cuatro mujeres que han acumulado multas por importes que oscilan entre las 30.000 y las 396.000 pesetas. Asimismo, un centenar de entidades bancarias -en Madrid actúan 128- ya han entregado la información requerida por el Ayuntamiento para embargar en las próximas semanas; las cuentas de 20.000 conductores infractores.

Eresa envió el pasado día 22 la correspondiente diligencia de embargo a 13 de los 20 conductores que entre los meses de julio y septiembre acumularon 964 infracciones (4.354.000 pesetas) por aparcar en doble fila, carril-bus y zonas de carga y descarga. La decisión municipal fue precedida de la creación de un servicio especial cuyos miembros se encargaron de llamar, escribir y visitar a los 12 hombres y ocho mujeres más multados de Madrid.Las gestiones no dieron, sin embargo, el resultado apetecido. Los miembros del servicio especial sólo consiguieron convencer por las buenas a cinco de los infractores: dos pagaron las 562.000 pesetas que debían y otros tres pactaron con Eresa el pago aplazado de las 500.000 pesetas que debían.

Agotada esta vía, los responsables de Eresa solicitaron información bancaria a las 128 entidades que actúan en Madrid y comprobaron que dos de los afectados no tenían cuenta corriente por lo que Eresa solicitó en el Registro de la Propiedad el embargo de sus bienes inmuebles por una cuantía de 260.000 pesetas.

Eresa envió a los bancos, al mismo tiempo, la correspondiente diligencia para embargar los 2.500.000 pesetas que debían los 13 infractores restantes, según informó ayer Luis María Huete, segundo teniente de alcalde y coordinador de temas de Hacienda.

Estos embargos, que se hacen por la cuantía exacta del importe adeudado, serán los primeros de una larga serie, ya que la máquina administrativa parece lista para utilizar este sistema.

A principios del mes de diciembre el Ayuntamiento se dirigió a las 128 entidades bancarias para solicitar información sobre 20.000 infractores, cuya deuda total asciende a 160 millones de pesetas.

Hasta el momento, según Huete, un centenar de bancos, entre ellos los más importantes, ha respondido ya sobre la existencia o no de cuentas corrientes por parte de los infractores incluidos en los listados municipales.

Obtenida esta información, se ha solicitado al Centro Municipal de Informática el tratamiento de las cintas enviadas por los bancos para confeccionar los listados definitivos de embargos. Según Huete esta operación puede estar terminada en dos o tres semanas, momento en el que se darían las correspondientes órdenes de embargo.

El plan municipal es alternar regularmente los embargos de cuentas corrientes por multas con los motivados por impago de impuestos. El embargo por deudas tributarias se realiza sin problemas desde hace meses. A finales de diciembre, por ejemplo, se procedió al embargo de 138 millones de pesetas repartidos en 8.629 cuentas. El procedimiento no pudo ejecutarse en 1965 casos, al no encontrarse suficiente dinero para hacer frente a la deuda.

Bien común

"El sistema de información bancaria, de cara a un embargo de cuenta corriente, funciona en este momento con normalidad tanto si se trata de impago de multas de circulación como de tributos", aseguró Huete. "Comprendemos que esta labor puede ser considerara negativa por algunos pero es un servicio al bien común y una garantía para todos los ciudadanos que cumplen a su debido tiempo", indicó el segundo teniente de alcalde, quien aseguró que, en casos especiales, se pueden dar facilidades de pago.Con la aplicación del embargo bancario el Ayuntamiento de Madrid espera poner fin al fuerte impago de multas que se produce en vía ejecutiva. En los tres últimos años, por ejemplo, Empresa Municipal de Recaudación Ejecutiva sólo ha podido cobrar la séptima parte de los 834 millones de pesetas, correspondientes a multas e impagados en período voluntario.