La cruda realidad
Más de la mitad del volumen contratado en la Bolsa de Barcelona durante los últimos 30 días corresponde a aplicaciones realizadas entre filiales y sociedades de cartera de los grandes grupos. La reordenación impuesta por la Comisión Nacional del Mercado y la entrada en vigor de la nueva ley de sociedades anónimas han empujado a una racionalización que de paso maquilla milagrosamente la aparente actividad de la bolsa. La primera semana del año nos ha devuelto la cruda realidad de los bajos volúmenes y la escasísima apelación de los inversores a la renta variable. El mercado quiso ponerse ayer a la altura de la irregularidad que golpea las principales plazas internacionales. Sólo al principio sonó el dinero.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.