El Dresdner Bank encarga al BBV el diseño para comenzar a cotizar la Bolsa española

El Dresdner Bank ha encargado al Banco Bilbao Vizcaya (BBV) que prepare el diseño para comenzar a cotizar en la bolsa española. EI objetivo del banco alemán es comenzar a cotizar entre los meses de febrero y abril, lo que depende en parte del la legislación que tiene que elaborar la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). De esta forma se puede convertir en la primera entidad financiera extranjera presente en los mercados españoles, aunque es posible que lo haga antes el grupo automovilístico Volkswagen, también alemán, que asimismo ha encargado al BBV la operación.

El banco alemán, instalado en España desde 1979, concedió hace aproximadamente un mes el mandato al BBV, que trasladó el encargo a su sociedad de valores y bolsa Interactivos. Esta sociedad, desde entonces, realiza el estudio preliminar sobre la colocación del valor en España. El principal y básico problema que encuentra, en es1.os momentos, se centra en el encaje legal que tiene una entidad extranjera en la legislación actual española.Asimismo,Interactivos, presidida por ex director general del Banco de: Espaffia, Raimundo Ortega, está analizando el sisterna de cotización en la República Federal Alemana. En ese sentido, la legislación alemana es, hoy, por hoy, bastante menos rigurosa que la española y que la del resto de las de los países de la Comunidad Europea. Un ejemplo claro es que no exige la presentación de resultados con periodicidad trimestral, come en España. Por ello, se encuentra en un período de adaptación transitorio para adaptar su normativa a la de la CE.

El marco legal es una tarea que tiene que abordar la CNMV. De hecho, este organismo ya ha hecho las primeras aproximaciones y espera tratarlo a fondo en las próximas semanas para aprobarlo en torno al 15 de diciembre. Precisamente, de la celeridad de la Comisión depende en gran parte la elección de la fecha de salida. Intercativos quiere apuntarse el tanto de ser la primera sociedad de bolsa en colocar a un banco extranjero. Y el Dresdner tiene el mismo interés en ser el primero.

A la espera, por tanto, del marco legal, el diseño de la operación tendrá como punto fundamental el capital que colocará el banco en la bolsa española. Dicha colocación será, obviamente, en pesetas, por lo que se tendrá que adoptar una fórmula similar a los ADR (American Depositary Receipt) existente en el mercado norteamericano. El ADR es un documento que certifica la propiedad de las acciones en términos equivalentes a valores de fuera de Estados Unidos.

La operación del Dresdner se hará, con mucha probabilidad, mediante una emisión de acciones con destino al mercado español por un valor nunca inferior al 5% del total del capital social del banco. Otra fórmula, menos probable y frecuente, sería la colocación por el valor de los activos españoles del banco. El aseguramiento de la operación estaría también conducido por el propio BBV y el propio banco alemán y en ella se contaría con la presencia de otras entidades españolas y extranjeras.

El Dresdner tiene, en la actualidad, dos sucursales en España -Madrid y Barcelona y su filial española tiene un capital social de 2.020 millones de pesetas. Los beneficios obtenidos el pasado año fueron de 792 millones, con unas inversiones crediticias de 47.500 millones.

El banco alemán cuenta con unos recursos propios (capital más reservas) de 6.609 millones de marcos (unos 460.000 millones de pesetas) y tiene intención de potenciar su presencia en España, según han manifestado fuentes de la entidad, que en España está dirigida por Frank J. Schrott y Holger Sommer.

Salida de Volkswagen

Cuando se produzca la colocación en bolsa del Dresdner, es muy probable que ya esté cotizando el grupo automovilístico Volkswagen, también alemán. La firma propietaria de la empresa española Seat ha encargado también al BBV la preparación del folleto de colocación unos meses antes que lo hiciera el banco. Fuentes del grupo han afirmado que su intención es estar en los mercados en el primer mes de 1990 y que el BBV sólo está a la espera de que la CNMV abra la veda.Tanto esta empresa como el Dresdner están inmersos en una carrera por salir a cotizar en los mercados españoles, donde no hay ninguna sociedad extranjera presente directamente. Además de ellos, han comenzado la preparación de la salida a bolsa varias entidades japonesas -Nomura, Daiwa, Nikko Secuties- y el grupo de empresas portugués Amorín.