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Polémica por la reanudación de la Serie Mundial

La Serie Mundial de béisbol se reanudará en San Francisco el próximo viernes, no exenta de polémica porque hay jugadores partidarios de la suspensión a causa del terremoto de San Francisco. El alcalde, Art Agnos, declaró que la ciudad precisaba de más días para resolver los problemas de tráfico causados por seísmo y verificar la condición del estadio del equipo local, los Giants. Realmente ésta ha sido una temporada maldita. Se sancionó de por vida a Pete Rose, uno de los mitos del deporte; falleció repentinamente el comisionado A. Bartiett Giamatti y varios jugadores se vieron involucrados en situaciones personales escandalosas. El año 1989 se recordará como la temporada en que el béisbol enlutó sus tradiciones y glorias.

Cuando se lance la primera pelota el viernes (madrugada del sábado, hora española) habrán transcurrido 11 días desde el último encuentro. A pesar de que los Oakland A's aventajan a los Giants dos partidos a cero y se ven cerca de la victoria, hay quienes argumentan, entre ellos los jugadores, que la Serie Mundial ha perdido valor y se debe cancelar como señal de respeto a las víctimas de la tragedia."Es todo una burla", manifestó Mark McGwire, primera base de los A's. "Estarnos haciendo el ridículo", declaró su compañero de equipo, el jardinero Dave Parker. "Debemos jugar o no jugar. Y si no podemos jugar aquí entonces cambiemos de sede", añadió.

El comisionado del béisbol, Fay Vincent, citó a Winston Churchill, el primer ministro de Gran Bretaña durante la Segunda Guerra Mundial, cuando presentó sus razones en proseguir con los partidos: "Churchill no cerró los cines durante la época que los alemanes bombardearon el país. Él continuó viviendo con toda serenidad", declaró Vincent. "Nadie ha hablado de dejar de publicar periódicos. Es dificil decir cuándo uno deja de hacer algo. Creo que para el viernes la comunidad ya estará lista para abrazar al béisbol", prosiguió.

Según la mayoría de los comentaristas, Vincent, de 51 años de edad, ha tomado las decisiones correctas. En menos de dos meses, desde que sustituyó a Giamatti, buen amigo y jefe, se ha comportado como un comisionado de categoría, un hombre de delicadeza, compasión y seriedad. Ha necesitado esos atributos y más para sobrevivir al año, un año que comenzó con la penosa investigación de Pete Rose y finalizó con la interrupción del evento cumbre de la temporada. "Fue un año en el que lo esperado no ocurrió y lo no inesperado fue más severo de lo imaginado. Sí, ha sido una temporada fuerte", afirmó Vincent.

Primero fue Pete Rose, una de las leyendas de este deporte, acusado de apostar dinero a favor de los resultados de su equipo. Luego el suicidio del ex jugador Donnye Moore y, por último, la muerte de Giamatti, anterior comisionado.

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