Profesionales de TVE amenazan con no cubrir la campaña si los partidos controlan la información

Cerca de 200 trabajadores de Televisión Española (TVE) del centro de Torrespaña, en Madrid, firmaron ayer un comunicado en el que amenazan con no cubrir la información de la próxima campaña electoral si prospera el acuerdo tomado por cuatro grupos de la oposición. El texto, suscrito por representantes del Partido Popular, el CDS, Izquierda Unida y Convergència i Unió, ha causado un profundo malestar entre los profesionales y la dirección de TVE, en particular por la pretensión de los firmantes de que los especiales informativos que se ofrezcan en los telediarios durante la campaña sean supervisados antes de su emisión, "bien directamente o por técnicos delegados", de los que no se precisa su procedencia.

"De prosperar la propuesta de enviar un delegado a controlar nuestras tareas informativas quedaría desvirtuado nuestro trabajo hasta el punto de hacer innecesaria nuestra participación", dice el comunicado de los profesionales. "Si sale adelante [el pacto de los partidos], los trabajadores de Televisión Española advertimos a las fuerzas políticas y a la dirección de TVE que nos negaríamos a participar en la cobertura de la próxima campaña electoral", agregan los trabajadores.El pacto "en defensa del pluralismo político y la objetividad informativa" en Televisión Española ante la campaña fue firmado ayer en el Congreso de los Diputados por José Ramón Caso, en nombre del CDS; Francisco Alvarez Cascos, por el Partido Popular; Nicolás Sartorius por Izquierda Unida, y Josep Maria Trias de Bes y Jordi Casas por CIU. El texto será entregado esta mañana a la Junta Electoral Central para que se pronuncie sobre el mismo.

Los cuatro grupos quisieron destacar que su acuerdo no va contra los profesionales del medio y pidieron a éstos "que ayuden a que se lleve a la práctica", en palabras de Nicolás Sartorius. "Queremos garantizar que no haya tergiversación y que lo emitido responda a lo principal" del hecho del que se informe, señaló Caso. El propio pacto insiste en uno de sus apartados en "el respeto y reconocimiento de la profesionalidad del conjunto de los trabajadores de TVE".

No obstante, las cuatro formaciones insisitieron en resaltar las "manipulaciones" cometidas, a su entender por TVE en la información de los últimos procesos electorales.

Para los profesionales de Televisión Española, las afirmaciones de manipulación sistemática constituyen, en el mejor de los casos, una operación política que no se nos escapa, agudizada ante el proceso electoral en ciernes".

"Censura previa"

El vicepresidente del Gobierno, Alfonso Guerra, aseguró anoche, en declaraciones a TVE, que el acuerdo de la oposición "pretende amordazar o coaccionar a los periodistas y a la libertad de expresión". "Establecen [los cuatro grupos] en el documento que debe haber una censura previa, que debe aprobarse previamente lo que de los partidos tiene que salir en los telediarios, que debe haber un delegado, una especie de comisario político de estos partidos para decir qué tiene que haber y qué no en las noticias".

Sobre la posibilidad de un debate, Guerra reclamó a los firmantes que se pongan de acuerdo -"como han hecho para elaborar un documento que es un disparate"- en la elección de un candidato. "Si ellos designan el candidato, Felipe González está dispuesto, el día que quieran durante la campaña, a celebrar un debate".

Los grupos políticos firmantes del acuerdo ofrecieron ayer al PSOE la posibilidad de que se sume al mismo. Según las cuatro formaciones, que se mostraron además convencidas de que su pacto será suscrito también por el PNV, los socialistas, "con los que se mantuvieron tres contactos, se han ido marginando y no han mostrado ningún interés" por el pacto. "El crédito al PSOE concluyó en las europeas" pasadas, dijo Álvarez Cascos.

Fuentes socialistas expresaron a este periódico su "extrañeza" por los criterios propuestos por los firmantes para el reparto de los espacios informativos y la celebración de cinco debates a lo largo de la campaña (ver EL PAÍS de ayer). Según tal reparto, el bloque de once minutos de cada Telediario se repartiría en tres minutos para el PSOE en cada uno de ellos, otros tantos para el Partido Popular, dos para el CDS, uno para Izquierda Unida, uno para CIU, y otro de forma rotativa para los restantes grupos.

La oposición pretende que el pacto sea cumplido también en los informativos del circuito regional de TVE y en todas las cadenas autonómicas.