Vómitos, higadillos y... los Monty Python, claro
Hace unos meses, como recordará el lector, TVE anunció para la sobremesa del domingo El sentido de la vida, la delirante comedia de los Monty Python. Alguien se dio cuenta luego que era una salvajada meter a la hora de la comida ante niños y niñas esta desmadrada y sana locura del sexteto británico y aplazaron su emisión. Hoy ya no está a la hora de la comida: está a la hora de la cena, con los mismos niños y niñas de vacaciones. Recordemos que el pasado miércoles -o jueves, en realidad- emitieron a las dos de la madrugada La cabalgata de Chaplin, y corramos un tupido velo para pasar de inmediato a afirmar que El sentido de la vida, la pongan a la hora que la pongan, es una gozada monumental, una demoledora farsa sobre la vida, articulada sin ortodoxia narrativa alguna, sencillamente acumulando episodios desmadradísimos, entre los que cabe destacar un memorable inicio que parodia los filmes de piratas sazonándolos con el mundo de las altas finanzas, un antológico capítulo dickensiano a costa de los espermas y los preservativos, un increíble banquete-vómito capaz de producir más asco que cualquier filme de vísceras al uso, o, ya puestos en lo de las vísceras, la material donación benéfica de unos hígados humanos, extraídos en vivo. En su momento la vimos subtitulada y, aun a riesgo de ser pesados con el tema, hay que reconocer que a los Monty Python no se les puede gozar doblados. Ese Michael Palin chillando descomunalmente como militar, ese John Cleese tan puesto en su universitaria clase de sexo, ese Eric Idle acompañándonos del restaurante a la bella casita de las afueras... ¿pueden tener sentido -sentido de la vida- más allá de la característica inflexión, irónica, de sus voces?El espacio de la comedia nos trae hoy una encantadora historia sentimental, Las campanas de Santa María, un aparente tópico filme de amor y bondad con el padre Crosby y la hermana Bergman, pero en realidad sublimado por la sutilidad ejemplar de Leo McCarey.
Las campanas de Santa María, a las 16
00; El sentido de la vida, a las 22.40; Tom Horn, 0.40. Todas, por TVE-1. El sexo opuesto, 18.30 por TVE-2.
Tom Horn fue la penúltima película de Steve McQueen y es un western sólido, melancólico y estimable dentro de su discreción de su voluntad de no levantar la voz. En cuanto a El sexo opuesto es un sencillo musical que pretende ofrecer una panorámica sobre el mundo femenino; insólita legión de mujeres en el reparto: June Allyson, Dolores Gray, Joan Collins, Agnes Moorehead, Joan Blondell...
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