El 'empate' en las urnas dificulta la gobernabilidad de Madrid

Una de cal y otra de arena. El Partido Popular se queda a medio millar de votos de los socialistas, mientras que el CDS pierde un 43% de sus electores. Una situación que complica aún más la ya difícil gobernabilidad de la capital.

Si se repitieran estos resultados en unas elecciones locales, las riendas del Ayuntamiento quedarían en manos de cualquier concejal que durante el mandato decidiera, siguiendo el ejemplo de Nicolás Piñeiro en la Comunidad, pasarse al otro lado de la balanza. Este es el mapa electoral madrileño cuando cuando faltan sólo cinco días para la moción de censura contra Juan Barranco.

Año de 1987, elecciones municipales: el PSOE aventaja al Partido Popular en 110.000 votos. Junio de 1989, elecciones europeas: los populares dan la vuelta a la tortilla y ganan a los socialistas en diez de los 18 distritos urbanos. Les separan sólo 565 Votos.

Pero la moneda tiene dos caras, y el hundimiento de los centristas hace inútil la conquista popular. La diferencia entre CDS e Izquierda Unida (145.000 votos en las municipales de 1987) ha menguado sustancialmente hasta quedar reducida a 16.992 votos. De esta forma, las opciones de izquierda se acercan en respaldo popular al conjunto del electorado del centro y la derecha.

En cualquier caso, las tres fuerzas más representivas (PSOE, PP y Centro Democrático y Social) han batido en esta ocasión récords históricos: sus niveles de apoyo electoral han sido los más bajos de todos los comicios celebrados en Madrid capital en los últimos siete años. Esta situación contrasta con la espectacular subida de Izquierda Unida, que supera en un 55,8% sus propios resultados en las europeas de 1987.

Varapalo al CDS

El PSOE ha conseguido 459.119 votos, casi la mitad de los obtenidos en las elecciones legislativas de 1982, y un 26% menos que en las europeas de 1987.

El Partido Popular también ha perdido electores, aunque en menor cuantía. Los populares han obtenido 458.554 votos, un 33% menos que en las legislativas de 1982, y un 18,6% menos que en las europeas de hace dos años.

El CDS se queda en 124.813 votos, un 43,2% menos que en las europeas de 1987. Este bajo resultado se produce en vísperas de la moción de censura contra el alcalde socialista Juan Barranco. El próximo día 29 está previsto que, en virtud del pacto entre el Partido Popular y el Centro Democrático y Social, Barranco tenga que entregar su vara de mando al centrista Agustín Rodríguez Sahagún.

Así las cosas, si el jueves prospera la iniciativa del centro-derecha, los madrileños pueden tener en los dos próximos años un alcalde cuyo partido ha sido respaldado en las últimas elecciones europeas sólo por el 8,8% de los vecinos que acudieron a las urnas hace una semana.

Un estudio a fondo por distritos -los datos provisionales se han tomado aún sobre la antigua división del municipio de Madrid en 18 distritos- arroja un resultado de diez a ocho en favor de los populares. Con respecto a 1987, el PSOE ha dejado escapar dos de sus feudos -Fuencarral y Ciudad Lineal-, donde el Partido Popular le ha arrebatado el primer puesto.

No en vano, los populares han aumentado sus diferencias con el PSOE en cuatro distritos en los que ya ganaba el partido de Fraga, y han acortado distancia con respecto al PSOE en ocho distritos, en los que siguen a la cabeza los socialistas.

El PSOE, por su parte, ha logrado sorprendentemente ganar terreno al PP en Retiro, Salamanca, Chamartín y Moncloa, los barrios donde está más arraigada la derecha.

Recuperación de IU

En los distritos donde tradicionalmente gana el PSOE también se han producido novedades. Izquierda Unida, que en las europeas de 1987 quedó siempre por debajo del CDS, ha logrado rebasar al partido de Adolfo Suárez en Villaverde, Vallecas y San Blas y es ahora la tercera fuerza en estos distritos. En Mediodía ha llegado incluso a superar por 598 votos al Partido Popular y ha escalado hasta el segundo puesto.

El total de votos obtenidos por Izquierda Unida en el municipio madrileño se ha elevado a 107.821. Esta cifra -prácticamente igual que la de las autonómicas del 87- sólo ha sido superada en los últimos siete años por los 113.112 votos que consiguió el Partido Comunista de España (PCE) en las elecciones municipales de 1983 y por los 120.834 votos que este grupo político obtuvo en las autonómicas de ese mismo año.

La abstención en las recientes elecciones europeas se ha elevado al 40,83% del censo, frente al 30,27% que se registró en las europeas de 1987. Este descenso en el número de madrileños que acudieron a las urnas parece haber perjudicado especialmente al PSOE.

Los distritos urbanos con mayor índice de abstención (Villaverde, Mediodía, Vallecas y San Blas), en los que el 42% de los electores se quedó en casa, coinciden con las mayores pérdidas de votos del Partido Socialista Obrero Español -entre 9.000 y 13.000 votos-, frente a un descenso mucho menos acusado del Partido Popular, que ha visto desaparecer entre 2.500 y 4.000 votos.

La única excepción se ha registrado en el distrito de Centro, al que corresponde la mayor abstención de todo Madrid (un 43,94%). Aquí las pérdidas de apoyo electoral con respecto a las europeas del 87 han sido muy similares entre el PSOE (6.824 votos) y el Partido Popular (6.513 votos).

364 carlistas

El Partido Carlista fue el menos votado de todo el municipio, con 364 votos, 235 menos que el Bloque Nacionalista Galego. En total, nueve de las 31 candidaturas presentadas en la capital no han superado la barrera del millar de votos y sólo 10 de ellos se sitúan por encima de los 10.000 votos.

Entre estas candidaturas minoritarias, y además de los grupos ya citados, destacan el Partido de los Trabajadores de España-Unidad Comunista (PTEUC), liderado por Santiago Carrillo, que obtuvo 26.543; Izquierda de los Pueblos, cuyo número uno de la lista era Juan María Bandrés, que consiguió 25.872; y Frente Nacional de Blas Piñar, que obtuvo 10.982, de los que 1.372 correspondieron al distrito de Salamanca y 1.362 al de Chamberí.

La lista de los 10 primeros grupos políticos se completa con la Lista Verde (adherida a los Verdes Europeos), que quedó en sexta posición con 27.801 votos, y Los Verdes Ecologistas, que fueron apoyados por 22.694 electores.