Un absentismo bien pagado
, Entre los eurodiputados que hacen más novillos destaca el líder comunista francés, Georges Marchais, al que sólo se ha visto una vez al año en el Palacio de Europa, y el magnate de la Prensa Robert Hersant, que, según el diario Libération, sólo ha hecho dos apariciones en la legislatura. Los días concurridos de la sesión son los martes y miércoles, y los viernes es frecuente que resoluciones y enmiendas se aprueben con tan sólo 40 diputados en el hemiciclo, menos de un 8% de la Asamblea.
Entre los diputados que se suelen quedar hasta el último día de sesiones destacan los alemanes y los británicos, aunque la presencia española suele ser nutrida, sobre todo, si se trata, como ocurrió esta primavera, de hacer fracasar un viernes una resolución que condena las corridas de toros por considerarlas crueles.El absentismo no guarda relación alguna con los ingresos. Con un sueldo base de 756.000 pesetas al mes, los italianos son los mejor pagados, seguidos por los franceses. Los portugueses figuran en la cola con 101.000 pesetas. Los españoles se sitúan en una categoría intermedia y cobran como sus colegas de las Cortes: unas 350.000 pesetas.
Pero si estas cantidades son sensiblemente diferentes, las dietas de los diputados son idénticas, así como los fondos de que disponen para contratar a un asistente y a una secretaria (473.000 pesetas al mes) y los llamados gastos de contacto. Un ex eurodiputado español que dejó la institución para volver a las Cortes calculó que si un parlamentario sabe utilizar los recursos de su mandato europeo y no lleva un tren de vida muy lujoso puede ahorrar en una legislatura (cinco años) 30 millones de pesetas.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.