Vídeo en televisión

Desde que a principios de los sesenta algunos artistas comenzaron a investigar en soporte vídeo nuevas fórmulas de expresión audiovisual hasta nuestros días, uno de sus objetivos ha sido incidir en la televisión, bien para sostenerla, bien para enfrentarse con ella. A lo largo de su breve historia, el vídeo de creación ha alimentado la imaginación de realizadores tanto de televisión como de la industria del clip musical, resultando paradójico que sus obras obtengan un eco tan reducido en los canales televisivos. En cualquier caso, aunque nunca han ocupado los horarios de máxima audiencia, lo cierto es que cada vez más las producciones de videoarte forman parte de la programación televisiva tanto europea como norteamericana.En España, el único programa que presta cierta atención a la creación en el terreno del vídeo es Metrópolis. Entre importantes espacios de tiempo se emiten obras principalmente de autores extranjeros. El eje de su última emisión se configuró sobre la obra del autor neoyorquino Daniel Reeves.

Reeves pertenece a la generación de videoastas norteamericanos de finales de los setentaochenta, entre los que se incluyen Edin Velez, Bill Viola, Dough Hall, y otros autores que con sus obras han definido diferentes géneros dentro del videoarte, acercándose con el paso del tiempo hacia lenguajes más televisivos, despegándose de las tendencias conceptuales, fundamentalmente enraizadas en Centroeuropa, cuyos trabajos subrayan códigos y mensajes contra la televisión.

El programa de Alejandro Lavilla presentó la obra Sombra a sombra, un videopoema producido por el Channel 4 Television-London y New Television WGBH/WNET. La profundidad de la poesía de César Vallejo, incomprensiblemente recitada en inglés con subtítulos en castellano, impregna de contenido el flujo visual de imágenes grabadas en zonas desiertas de los Pirineos españoles. Si bien la particular forma de elaborar el ritmo audiovisual y la edición corresponden al personal estilo de Reeves, no puede enmarcársela como la mejor pieza de este autor. La duración de la obra, hábilmente recortada por el realizador del programa con entrevistas al autor, resulta ligeramente larga. Otras piezas como Sabda o Ganapatila spirit in the bush, internacionalmente premiadas en diferentes festivales, definen con mayor precisión la sensibilidad de Daniel Reeves.

Sin duda, el que Metrópolis se encuadre dentro de la sección de informativos determina en muchos casos que la actualidad prime sobre el interés de los contenidos de la obra de autor. Es tal vez necesario articular enfoques que desempolven grandes piezas de videoarte que se han quedado en el tintero de festivales.