Un contrato leonino

La serie española de Spitting image, que ya estaba en marcha hace casi un año, con el nombre de Los Pepones, y que de momento ha sido paralizada por TVE para no coincidir con el calendario electoral -elecciones europeas, autonómicas y legislativas- no tuvo que adquirir los derechos de autor de la serie británica, ya que, entre otras razones, no están registrados.Lo que sí intentó el equipo de Los Pepones, en el que trabajan unas 16 personas, fue contar con los muñecos de Spitting image de los creadores británicos, pero no llegaron a ningún acuerdo debido a que las condiciones del contrato eran "leoninas". Afirman que por una especie de alquiler, en el que no eran propietarios de los muñecos, ni TVE de las imágenes, se les quería cobrar 6.300 libras (cerca de un millón y medio de pesetas) por muñeco.

Así pues abordó la realización el equipo de muñequistas dirigidos por José Manuel Reyes, el mismo del programa La bola de cristal, que dirigió durante cuatro años Lolo Rico Oliver, a quien se le ofreció la dirección de Los Pepones. Este equipo trabajó sobre los bocetos de los caricaturistars Jim y Killian, y cada muñeco viene a costar alrededor de 400.000 pesetas. Los primeros, a modo de prueba, fueron Isabel Pantoja y Plácido Domingo. Cuando se vio lo positivo del resultado se abordó un nuevo presupuesto con el que confeccionar 30 nuevos personajes, entre los que se encontraban Felipe González, Alfonso Guerra, Carlos Solchaga, Fraga' Miguel Boyer, Mario Conde, Ruiz-Mateos o Isabel Preysler.

El equipo de Los pepones daba ya los últimos toques a estos muñecos cuando la dirección de TVE les comunicó que se paralizaba el programa para "no herir sensibilidades" en el período electoral que se producirá durante este año y el próximo.

Posteriormente había que contratar a los guionistas. Éstos iban a ser -y serán, si el proyecto se retorna- el mismo equipo de guionistas de La bola de cristal, compuesto por Carlos y Pedro Fernández Liria, Carlos Frabetti y Santiago e Isabel Alba Rico -estos dos últimos, hijos de la directora del programa-. Además tenían previsto pedir colaboraciones a periodistas, humoristas y escritores, con el fin de incorporar diversos puntos de vista y abrir el programa a diferentes opiniones.