La asamblea de Prevision Sanitaria Nacional no tomó ninguna decisión sobre la venta irregular de viviendas
La asamblea de representantes de la mutua médica Previsión Sanitaria Nacional (PSN), tras siete horas de discusiones, no adoptó ninguna medida concreta sobre el único punto del orden del día, el expediente abierto al Consejo de Administración de la entidad por la venta presuntamente irregular de siete viviendas a familiares, amigos o miembros del propio consejo. La asamblea sólo acordó remitirse a lo que en su día dictamine la Dirección General de Seguros, organismo que abrió el expediente. Javier Matos, presidente del Colegio de Médicos de Madrid, pidió la dimisión de todo el consejo, incluido él mismo, lo que no fue aceptado.
La asamblea comenzó con la lectura de un informe jurídico realizado por un catedrático de Derecho a petición del presidente de PSN, el doctor José Luis Gutiérrez Herrero. El informe exculpa de cualquier responsabilidad al presidente de PSN, al entender que aquél está autorizado, estatutariamente, a cumplir y hacer cumplir los acuerdos adoptados por el consejo de administración, por lo que el presidente no se excedió en sus atribuciones. El acuerdo motivo de la polémica fue el que, en diciembre de 1985, mandató al presidente a poner en venta varias viviendas propiedad de la mutua.Javier Matos, miembro del consejo de administración y presidente del Colegio de Médicos de Madrid, pidió, al comenzar la asamblea, la dimisión de todos los miembros del consejo, el nombramiento de una comisión gestora, la devolución de las viviendas Por parte de los consejeros o familiares de aquéllos, y una declaración de los consejeros sobre sus patrimonios antes de acceder a los cargos y en la actualidad.
La propuesta de Matos fue apoyada por un grupo numeroso de asambleístas aunque, como afirmó uno de ellos "cada uno por sus propios motivos". Otros asambleístas consideraron que la propuesta de Matos era demagógica, ya que el mandato de la actual junta directiva de PSN está a punto de concluir. Las elecciones para renovar la asamblea de representantes se celebrarán el próximo 1 de diciembre, y las elecciones de segundo grado para elegir el nuevo consejo de administración, el 14 de enero.
Numerosos asambleístas intervinieron no sólo sobre las viviendas sino ampliando el temario a la gestión general de la mutua. El representante de los médicos en paro fue particularmente crítico. Las intervenciones, a tenor de las declaraciones efectuadas posteriormente por varios de sus protagonistas -la asamblea se celebró a puerta cerrada-, reflejaron una línea reprobatoria dura hacia la gestión del consejo junto a otra más contemporizadora.
La asamblea no aprobó una resolución, presentada por un sector que pedía la dimisión del consejo por motivos éticos.
'Agua de borrajas'
Poco después de las dos de la tarde, el presidente del colegio de Farmaceúticos, Pedro Gómez de Aguero, segundo candidato en las próximas elecciones en la lista encabezada por Juan Blázquez, apoyado por la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos, abandonaba la asamblea manifestando su convencimiento de que todo iba a quedar en agua de borrajas.Ante la imposibilidad de adoptar un acuerdo en la propia asamblea, se decidió que una comisión de asambleístas redactara un comunicado final. El comunicado, ratificado cuando ya la mayoría de asistentes había abandonado la asamblea, se limita a decir: "Todas las cuestiones que puedan suscitarse en relación con la mutualidad deben resolverse dentro de sus órganos administrativos. Existiendo un expediente incoado por la Dirección General de Seguros, esta asamblea se abstiene de formular pronunciamiento alguno, remitiendose a la resolución firme que en su día recaiga (sobre el expediente)".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.