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EL SORTEO DE LA 'MILI'

Los objetores realizaron numerosas marchas de protesta

Javier Rivas

Grupos de objetores y colectivos pacifistas y antimilitaristas se manifestaron ayer en las principales ciudades de España para protestar contra el servicio militar y la prestación social sustitutoria prevista por la ley de objeción de conciencia. Las marchas más numerosas se produjeron en Madrid y en Barcelona, con cerca de un millar de personas en cada una de ellas. En el centro de Madrid, grupos de jóvenes se enfrentaron con efectivos antidisturbios de la policía durante más de una hora al término del acto de protesta.

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Una pancarta en la catedral

Los incidentes comenzaron en Madrid al final de la manifestación, en la que algo más de mil personas habían desfilado en un ambiente festivo y acompañados por charangas desde la glorieta de Atocha hasta la plaza de Jacinto Benavente. La marcha terminó con un minuto de silencio por los "muertos, asesinados, suicidados o hechos polvo por la mili", en palabras de uno de los convocantes. Poco después, unos 50 jóvenes comenzaron a lanzar piedras y litronas contra una oficina de la Dirección General del Tesoro, sita en esa plaza, y contra un dotación de la Policía Municipal que había vigilado el desarrollo del acto.El enfrentamiento se extendió al aparecer varias dotaciones de miembros del Cuerpo Nacional de Policía equipados con material antidisturbios. Los jóvenes realizaron saltos hasta la plaza de Tirso de Molina y el Rastro, donde los incidentes prosiguieron durante cerca de una hora entre el númeroso público que en la mañana de ayer acudía al mercado popular madrileño. Al menos cuatro jóvenes fueron detenidos por los agentes, que realizaron diversas cargas. Uno de los coches patrulla de los agentes resultó con los cristales rotos al ser alcanzado por varias piedras, mientras un policía municipal fue alcanzado por un objeto en la cabeza que le causó una leve conmoción.

Julio Rodríguez Bueno, portavoz de la Comisión anti-OTAN de Madrid, una de las organizaciones convocantes de la protesta, resaltó a este periódico la diferencia entre el acto de protesta en sí y los incidentes posteriores, que lamentó, aunque justificó a algunos de los intervinientes por tener que incorporarse a filas sin que se les haya reconocido la objeción de conciencia.

La manifestación de Madrid iba encabezada por una pancarta con el texto "Insumisión. Libertad objetores presos" que era portada por varios objetores. Banderas republicanas y pancartas de la Comisión anti-OTAN, la Asamblea de Mujeres, los. colectivos Mili-KK y partidos de extrema izquierda eran visibles a lo largo del recorrido. Durante la marcha se corearon numerosos lemas en contra del servicio militar, los presupuestos de Defensa y la ley de objeción de conciencia y a favor de la puesta en libertad de José Manuel Fierro, recluso en la prisión militar de Alcalá de Henares tras declararse objetor durante la prestación del servicio militar. Fierro ha sido reconocido como preso de conciencia por Amnistía Internacional.

En Barcelona, alrededor de un millar de personas se manifestó sin incidentes desde la plaza de Universidad y hasta la sede del Gobierno Militar, en el paseo de Colón, donde un portavoz de los organizadores leyó un manifiesto de protesta.

Paralelamente, centenares de jóvenes, muchos de ellos acompañados por sus novias y amigos, acudieron al cuartel del Bruch para obtener información sobre su destino informa la redacción de EL PAÍS en Barcelona.

Un grupo de militantes de las juventudes del CDS se concentró en las inmediaciones del cuartel y lanzó octavillas reivindicando un servicio militar de tres meses.

En Pamplona, la manifestación de los objetores, apoyada entre otros grupos por Euskadiko Ezkerra, congregó a algo menos de mil personas, informa Mikel Muez. Durante la marcha, que iba encabezada por una pancarta apoyando la insumisión civil de los objetores, se corearon diversos gritos contra la mili y el Ejército, entre ellos algunos como "la mili no mola, ni vasca ni española", en referencia a la campaña desarrollada por las juventudes de HB, que propugnan la constitución de un Ejército vasco. En la localidad navarra de Alsasua, nueve objetores quemaron anoche sus cartillas militares en una hoguera pública.

'Quintos' de cerveza

En Valencia, más de 300 personas contemplaron una breve sátira teatral que el grupo antimilitarista Mili KK representó en la plaza de la Virgen. Ocho jóvenes, ataviados con prendas que simulaban uniformes de los ejércitos de Tierra, Mar y Aire, ironizaron, entre otros, sobre los conceptos del honor y la disciplina militar y sobre la presencia de la mujer en el Ejército, informa Manuel S. Jardí.

En la representación tampoco faltaron los papeles del objetor religioso y del encarcelado por negarse a realizar el servicio militar. Paralelamente, junto al escenario se distribuyeron quintos de cerveza, "que es la forma como entendemos un sorteo de quintos", según uno de los participantes. En Oviedo, los manifestantes también sortearon quintos de cerveza y quemaron un tanque de cartón y un muñeco vestido de militar.

Los manifestantes en Logroño fueron unos 200, entre ellos bastantes mujeres con gorros de papel de periódico, según informa la agencia Efe.

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Sobre la firma

Javier Rivas
Forma parte del equipo de Opinión, tras ser Redactor Jefe de la Unidad de Edición y responsable de Cierre. Ha desarrollado toda su carrera profesional en EL PAÍS, donde ha trabajado en las secciones de Nacional y Mesa de Cierre y en las delegaciones de Andalucía y País Vasco.

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