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LA SUCESIÓN DE REAGAN

Mario Cuomo, fortalecido por el triunfo demócrata en Nueva York

Nueva York votó Michael Dukakis. El Empire State otorgó esta vez su confianza a los demócratas, lo que no había ocurrido en las dos últimas elecciones, donde Ronald Reagan barrió en este Estado a Jimmy Carter (19 80) y a Walter F. Mondale (1984). La victoria de Dukakis en Nueva York hay que atribuirla, según los analistas, a la elevada participación de mujeres en la votación del martes y al trabajo incansable del gobernador, Mario Cuomo, que emerge, tras el fracaso de Dukakis, como la gran esperanza demócrata para las elecciones presidenciales de 1992.Durante la jornada electoral, más de 2.000 neoyorquinos fueron consultados sobre la posibilidad de que Cuomo se presentara a las próximas elecciones a la presidencia, y el 54% contestó afirmativamente, el 22% dijo que no y el 24% contestó que no estaban seguros.

Dukakis consiguió en Nueva York un total de 3.203.194 votos frente a los 2.951.052 del presidente electo, George Bush.

En la ciudad de Nueva York, la gran metrópoli norteamericana, Dukakis consiguió 1.287.951 votos, casi el doble que Bush,. que fue votado por 642.342 electores.

Michael Dukakis ganó el 49%. de los votos blancos del Estado, el 90% de los negros y el 78% de los hispanos, según la cadena de televisión NBC. Bush sólo ganó el 39% de los votos femeninos del Estado y el 5 1 % de los masculinos, lo que revela el éxito de la propaganda demócrata en los últimos meses ba o el lema ¡Otra mujer contra Bush!

Nueva York es, después de estas elecciones, y junto a Massachusetts, el gran feudo del Partido Demócrata. En estos momentos, en la zona coinciden tres líderes demócratas de gran carisma. Se trata, además de Mario Cuorno, del alcalde de la ciudad de Nueva York, el polémico Edward Koch, y del senador Patrick Moynihan, que en las elecciones para el Senado consiguió un porcentaje de votos favorables del 62%, todo un récord para tratarse de una reelección.

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