Espacio social y unión monetaria, prioridades de la presidencia española de la Comunidad Europea

El desarrollo del espacio social europeo y la planificación de la unión monetaria serán los dos temas prioritarios que abordará España durante el primer semestre de 1989, en que ocupará la presidencia de la Comunidad Europea (CE). Con la llegada mañana a Madrid del presidente de la comisión, Jacques Delors, se inicia la cuenta atrás para el período español al frente de la CE, que estará coordinado con el segundo semestre, bajo mandato francés.

Los equipos creados para preparar la presidencia española de la CE tienen ya muy avanzados los documentos que servirán de base para esa dirección comunitaria durante el primer semestre de 1989. Presidencia del Gobierno, el Ministerio de Asuntos Exteriores -especialmente la Secretaría de Estado de Pedro Solbes- y la oficina diplomática española en Bruselas llevan semanas trabajando intensamente para que los seis meses españoles sean un éxito de gestión al frente de la CE. Ya se tiene preparado el calendario de consejos de ministros -tanto formales, en Bruselas, como informales, en España- y en los próximos días estarán concluidos los informes sobre la filosofía española en cada uno de los grandes apartados que se deberán discutir durante 1989. Esa filosofía será expuesta por Felipe González en el trancurso de una conferencia que pronunciará en Bruselas en la primera quincena de diciembre, nada más concluir la cumbre de Rodas (Grecia).En los planes oficiales figuran siete grandes apartados que, a juicio de las autoridades españolas, deberían abordarse entre enero y, junio de 1989, y luego continuar de forma coordinada hasta Final de año con la presidencia francesa. Estos siete temas se refieren a mercado interior, espacio social, armonización fiscal, unión monetaria, precios agrarios, relaciones exteriores y cooperación política. De esos asuntos son el espacio social europeo y la unión monetaria los que España quiere impulsar de forma especial durante su mandato.

Política social

La política social será, sin duda, uno de los puntos fuertes de España durante su presidencia comunitaria. Las críticas suscitadas en los últimos meses sobre la falta de una política social definida en la Comunidad han servido de acicate para las autoridades españolas, que pretenden impulsar las ideas sobre el espacio social europeo presentadas recientemente por Manuel Marín, en su condición de comisario europeo. Se pretende que ese impulso se prolongue durante todo el año, para lo cual ya se han iniciado los contactos con el Gobierno francés para que asuma las propuestas españolas durante su mandato.

Es significativo que, por primera vez desde que se comenzaron los seminarios hispano-franceses, el próximo fin de semana, en León, acudirán los ministros de Trabajo de ambos países, en un intento de coordinar esa política social. Fuentes de la Moncloa indicaron a este periódico que en los próximos días se darán pasos importantes en ese camino de crear un espacio social europeo. Mañana, jueves, el presidente del Gobierno, además de entrevistarse con Jacques Delors, recibirá a una delegación de la Confederación Europea de Sindicatos (CES), con la que hablará, con toda seguridad, sobre política social comunitaria. Posteriormente, en el seminario hispano-francés continuará el cambio de impresiones.

La presidencia española tiene la desventaja de que las elecciones al Parlamento Europeo, en junio, restarán capacidad de ejecutiva al Consejo de Ministros en los dos últimos meses del semestre. Por eso, en Presidencia del Gobierno se está buscando la mayor coordinación posible con las autoridades francesas.Respecto a la unión económica y monetaria, la presidencia española intentará por todos los medios que las tareas de la comisión de trabajo creada por Jacques Delors -en la que participan dos expertos españoles: Mariano Rubio y Miguel Boyer- concluya con éxito sus labores en abril, de forma que el Consejo de Ministros de Economía y Finanzas (Ecofin) les dé el visto bueno en la reunión informal prevista para mayo en S'Agaró (Gerona) y puedan ser presentadas, tal y como estaba previsto, en la cumbre de Madrid, en el mes de junio. La comisión Delors volverá a reunirse el próximo martes, esta vez en Luxemburgo, para continuar los trabajos iniciados el 13 de septiembre en Basilea.

Los otros cinco grandes temas pendientes de la CE, que tendrán que plantearse durante el semestre de mandato español, están obligados por el calendario habitual de la Comunidad. En mercado interior tienen que continuar los trabajos iniciados durante el pasado año en busca del mercado único europeo.

Respecto a la armonización fiscal, durante el próximo semestre deberán tomarse importantes decisiones, tanto en los impuestos indirectos (IVA) como en los directos; en ambos casos, las posturas entre Francia y el Reino Unido son opuestas. También deberá abordar la presidencia española los precios agrícolas, que siempre se deciden durante el primer semestre de cada año; y, por último, dos temas políticos, como las relaciones exteriores -sobre todo la apertura a la Europa del Este y al golfo Pérsico y la cooperación política.