Brandeburgo
La presente tiene doble motivo: enmendar parte del contenido de mi carta publicada en EL PAÍS del 7 de septiembre de 1988 y pedir disculpas por no haber contrastado suficientemente toda mi información.Las diferencias que yo atribuí, en la última frase de mi carta, entre Brandeburgo y Brandemburgo no existen, pues de las dos formas pueden denominarse tanto la ciudad (o la comarca) alemana como los conciertos de Bach.
No obstante, el nombre de los, conciertos sí que proviene del margrave Christian Luwdig de Brandemburgo (o Brandeburgo), por quien fueron encargados y a quien fueron dedicados.-
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