Hernández Gil niega que la nueva doctrina influya en los casos de personas aforadas

Antonio Hernández Gil, presidente del Tribunal Supremo y del Consejo General del Poder Judicial, negó ayer la posibilidad de que la doctrina sentada por la sentencia del Tribunal Constituccional pueda afectar a los casos de personas aforadas, como, por ejemplo, los policías acusados por la desaparición de Santiago Corella, el Nani, o el caso del subcomisario José Amedo.Aunque el tribunal que ha juzgado el caso de la desaparición del Nani ha participado también en la instrucción del mismo, pues entre otras decisiones dictó el auto de procesamiento, Hernández Gil precisó que no hay un efecto directo de lo resuelto en la sentencia del Tribunal Constitucional en esos casos. "El Tribunal Constitucional ha circunscrito mucho el alcance de su resolución, añadió Hernández Gil, "que exclusivamente se refiere al artículo 2, apartado 2 de esa ley 10 del año 1980. E insistentemente lo dice. Y deja de tratar otras cuestiones que se plantearon, porque se planteaban con carácter subsidiario, y una vez que ha resuelto la cuestión que estimaba planteada como principal, que era estrictamente esa, no hay un pronunciamiento expreso sobre nada de lo demás".

Por otro lado, Hernández Gil calificó de "rotundamente falsos" los rumores que especulaban con una posible dimisión de todos sus cargos.

Hernández Gil, que presidió la reunión que los vocales del Consejo mantuvieron con los presidentes de las audiencias territoriales de toda España, explicó que no tenía intención de dimitir y que las noticias difundidas por algunos medios informativos en ese sentido "no son verdad".