Las mujeres no alcanzan el 25% en el Comité Federal ni en los órganos regionales del PSOE
El Partido Socialista Obrero Español (PSOE) ha incorporado a más de 200 mujeres a sus órganos de dirección federales y regionales, lo que supone algo menos del 20% de los más de 1.100 puestos disponibles. Este resultado supone mi avance considerable sobre la situación anterior, pero la cuota del 25% se ha respetado sólo en la comisión ejecutiva federal del PSOE, que fue elegida directamente en el 31º Congreso, el mismo que aprobó el mencionado porcentaje entre abrazos y lanzamientos de flores y con el apoyo personal de Carmen Romero, la esposa de Felipe González.
La incorporación de mujeres se ha producido sin el desplazamiento de un número equivalente de hombres. Prácticamente en todas partes se ha recurrido al procedimiento de ampliar el número de puestos, para dar entrada a mujeres. Por ejemplo, las comisiones ejecutivas han incrementado el número de cargos en más de medio centenar, casi siempre por motivos derivados de la cuota femenina.Ana Miranda, portavoz de la ejecutiva federal del PSOE, asegura que el proceso ha sido "muy positivo", aunque no se haya alcanzado en todas partes el listón del 25%. Miranda forma parte de la dirección federal de los socialistas desde el 31º Congreso, pero no es una recién llegada a la política: cuenta con una trayectoria política considerable y ha sido elegida diputada al Parlamento europeo.
Carmen Hermosín, también miembro de la dirección federal, se muestra igualmente satisfecha del funcionamiento de la recomendación congresual: "A mí no me importa nada que me llamen mujer-cuota, porque lo importante es conseguir que las mujeres participen", opina esta dirigente del área de Organización del PSOE, cuya militancia procede de los tiempos de la clandestinidad y que tiene también escaño parlamentario.
El ejemplo contrario es el de Carmen Olmedo, una de las cinco mujeres incluidas en la ejecutiva del PSOE de Andalucía, que antes de acceder a un órgano de dirección socialista no había desempeñado puestos ejecutivos ni parlamentarios. "Donde entran las mujeres", señala Olmedo, "se enriquece el debate, se tratarán temas que antes no se trataban. No importan las resistencias, porque lo importante es que las mujeres entren en los cargos".
Carmen Olmedo dirige, desde 1979, el centro asesor de la mujer de Málaga y en la actualidad se encarga de la implantación del Instituto de la Mujer en Andalucía. En su opinión, la principal diferencia es que "por regla general, las mujeres no tenemos ambiciones políticas" y rechaza que ellas tengan menos capacidad que los hombres. "En ese caso", comenta, "queremos que las tontas tengan las mismas posibilidades que los tontos".
Castilla-La Mancha, Murcia, Navarra y Ceuta son las federaciones socialistas menos cumplidoras: las mujeres de sus comisiones ejecutivas quedan por debajo del 20%. Galicia, Canarias y La Rioja, en cambio, han dado exactamente en la diana: 25% de mujeres en sus respectivas ejecutivas. Los socialistas madrileños incorporaron a ocho para un total de 33 puestos, lo que supone algo más del 24%.
Las militantes catalanas sólo gozan de un escuálido 13% de puestos en la dirección del PSC, pero el congreso correspondiente se celebró antes de que el PSOE aprobara el famoso porcentaje. El Partido de los Socialistas de Cataluña (PSC) se fijó un porcentaje de mujeres más modesto que el PSOE, el 15%, aunque con el compromiso de alcanzar el 18% en tres años. Sin embargo, según informa Enric Company, en la dirección del partido elegida en el mismo congreso que adoptó el acuerdo se incluyó sólo un 13% de mujeres en la comisión ejecutiva (6 sobre sobre un total de 46 integrantes) y del 7,5% en el secretariado de la misma, que es en la práctica el principal órgano directivo. De los 27 integrantes del secretariado, 2 son mujeres.
En el congreso de los socialistas vascos, celebrado este mismo mes, fue ampliada la ejecutiva pero sólo se llegó a incorporar un 23% de mujeres: cinco puestos sobre un total de 21.
Con calzador
La aplicación de la norma del 25% en los órganos internos del PSOE andaluz ha supuesto un vuelco en las comisiones ejecutivas regional y provinciales. La mayoría de las militantes que se han beneficiado de la norma ya venían ejerciendo cargos públicos en ayuntamientos y parlamentos, o responsabilidades orgánicas. Sin embargo, en muchas ocasiones se ha dejado para el final el asunto de las mujeres y éstas han tenido que integrarse poco menos que con calzador, informa Carlos Funcia.La ejecutiva andaluza, renovada en el congreso celebrado a finales de marzo pasado, tiene 5 mujeres de un total de 21 miembros, lo cual supone el 23% del total. La ejecutiva anterior, que presidía José Rodríguez de la Borbolla, no tenía mujeres. Además de Carmen Olmedo, la dirigente de más amplia trayectoria política es la senadora Amparo Rubiales, que procede del PCE.
De los 16 miembros que componen la nueva comisión ejecutiva del Partido Socialista del País Valenciano (PSPV-PSOE), cinco son mujeres, informa Manuel S. Jardí. Entre ellas figura María Antonla de Armengol, abogada de profesión. Se dedica plenamente a la actividad política desde hace años. Es uno de los principales personajes de lo que se ha dado en llamar la fontanería del secretario general y presidente de la Generalitat, Joan Lerma.
Despejada la incógnita de lo que iba a suceder con la cuota en la organización del partido, las mujeres socialistas giran ahora sus ojos hacia la Moncloa esperando el anunciado reajuste en el Gobierno.
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