A Detroit le falta una victoria para alcanzar el título de la NBA

Magic Johnson proclamó que las finales de la NBA eran una guerra y sus compañeros salieron el jueves dispuestos a dar batalla. No contaron con los árbitros. Faltas estúpidas enviaron al banquillo a tres jugadores claves, dejando a los Lakers sin reboteadores y, a fin de cuentas, sin la victoria. Con su triunfo por 104 a 94, los Detroit Pistons están a falta de una. No son muchos los especialistas que dudan que ahora se les escape el campeonato.

Los Lakers anotaron 15 de los primeros 17 puntos del partido, pero la ventaja se desvaneció con el calor de la cancha. Alen tados por 41.732 seguidores, la entrada mayor en la historia de los play off, los Pistons ignoraron la tentación de desquitarse contra los manotazos de los Lakers y en su defecto se aprovecharon de los tiros libres. Sólo fallaron cinco de 23. Se colocaron por delante en el segundo tiempo y su ventaja llegó a ser de 13 puntos. Aunque los Lakers la rebajaron a dos en una ocasión, en el tercer tiempo, los Pistons nunca cedieron. Islah Thomas y James Edwards encestaron un par de canastas, Johnson caminó con el balón y ahí se acabó todo."Intentaron dejarnos hechos polvo. Gracias a Dios pudimos recobrar la ventaja", dijo el alero Adrian Dantley.

Dantley anotó 25 tantos, 19 en la primera mitad. Fue imprable en los momentos claves y la razón por la cual los Lakers quedaron inútiles en la defensa. James Worthy intentó descabellarlo en una entrada en el minuto quinto del partido y acabó pagando con su tercera falta personal. El otro alero de los Lakers, A.C. Green, también cometió tres faltas en el primer tiempo. Cuando al suplente Michael Cooper le pitaron la tercera falta al comenzar el segundo tiempo había mejor equipo en el banquillo que en la cancha.

Pueden ser campeones, pero los Lakers están cometiendo errores de novatos. En la NBA hay que saber jugar fuerte.

La serie regresa ahora a Los Ángeles, donde los Lakers tienen el domingo y el próximo martes para completar su sueño de ser el primer equipo en repetir como campeón desde los Celtics de 1968 y 1969.