Un éxito dorado 'Las chicas de oro' triunfa en España

, Las serie norteamericana Las chicas de oro parece haber conseguido asentarse en España en un horario que conoce pocos éxitos rotundo en la historia del medio. Cada semana, casi 10 millones de españoles se sientan frente al televisor para ver uno de los telefilmes de moda en el mundo. La serie, producida por Witt-Thomas-Harris (Enredo, Benson) en asociación con Walt Disney, ha sido reiteradainte premiada desde su estreno, en septiembre de 1985.

Las chicas de oro (Golden giris) nació de una idea de la cadena NBC sobre gente mayor, pensando en la audiencia de la tercera edad. Lo que presentaron Paul Wítt, Tony Thomas y Susan Harris -el equipo de Enredo y Benson- dejó perplejos a los ejecutivos de la cadena. "Esto no se puede emitir", certificó uno de ellos. Era un humor demasiado crudo, y además se empeñaban en la tesis, "un tanto loca", de que hay vida, y por tanto sexualidad, después de los cincuenta. Pero el programa siguió adelante, entre otras cosas porque e predominio de la NBC sobre las cadenas rivales, la ABC y la CBS, se había edificado precisamente a partir de programas con el mismo grado de incertidumbre inicial (véase Canción triste Hill Street).Las chicas de oro comenzó emitirse en septiembre de 1985 desde entonces los premios (entre otros, los Emmy a la mejo comedia y actriz, en las persona de Rue McCalahan y Betty White) y el aplauso del público llovieron sobre la serie. No se recordaba un éxito igual desde El showv

Bill Cosby, también de a NBC.

En oco tiempo, los personaj Dorothy, Blanche, Rose y So hia, dos viudas, una divorciada la madre de esta última, qu comparten una casa en Miam fueron descubiertos, no sin algú pasmo, por el público norteamericano.

Lo que más sorprendió de la nueva comedia fueron los esca sos remilgos de las chicas a 1 hora de hablar y actuar. Las se ñoras no tienen pelos en la len gua, y el recato, sobre todo se xual, decretado para las pers nas de su edad no es de recibo su caso. Los diálogos, pieza cl ve en toda telecomedia, son b llantes, llenos de humor y retr ca, crudos a veces, y otras en 1 frontera de lo macabro. Las chicas de oro se atreven con todo, así a Rose (Betty Mlite) se puede morir un amante en cama, y a Dorothy aparecer una amiga lesbiana.

Durante su primera tempor da todo fueron flores para Las chicas de oro y sus geniales inté pretes, Bea Arthur, Rue McCInahan, Betty White y Estel Getty. En la segunda, la de 198 1987, y entre críticos y profesi nales del medio, ya le saliero enamorados respondones. Los cargos fueron los de cierta creciente monomanía de la serie con el tema sexual, su tendencia absurdo y, en general, la dism nución del nivel de calidad de guiones. No hay que dejar que success (éxito) se convierrIta en cess, dijo algún aficionado a los juegos de palabras. La serie conserva en la presente tempora los más altos índices de audie cia en el panel televisivo nort americano. Las últimas noticias son que Rose ha escrito una carta a Mijail Gorbachov y sueña con una visita suya anunciada televisión.