Víctima de su tiempo
Probablemente sea el free cinema inglés uno de los movimientos cinematográficos más castigados por el paso de los años. Es frecuente escuchar recomendaciones que nos hablan de poner ojos de época ante la ocasional presencia de un filme cualquiera de esos jóvenes luchadores de finales de los cincuenta y primeros sesenta, advertencia que ya nos previene de su desajuste receptivo hoy en día.Sin ser del todo necesaria la postura, pues una pizca de espontaneidad y libertad creador todavía pueden recibirse con agrado, hay que convenir en que atacar el free cinema alegando esquemas obsoletos es injusto, sobre todo si tenemos en cuenta la validez de sus productos en su momento, a la postre la única pretensión de sus creadores nunca dados a la consagración eterna. Así las cosas, y sin necesidad de ponemos ojos de época, catalejos a veces deficientes, acudamos esta noche a la cita con uno de los mástiles más lustrosos del velero free. Es de 1959, se llama Mirando hacia atrás con ira, y lo firma Tony Richardson -su ópera prima en el largometrajea partir de un texto del emblemático John Osborne.
En él descuella un personaje prototipo, James Porter, insatisfecho de la sociedad en que le toca vivir y de las personas que le rodean, pese a que no necesariamente todas pretendan serle hostiles. Es posible que el tono rabioso con que Richardson la tomaba con sus criaturas haya descendido enteros, luzca hoy más suave y hasta nos ruborice su final un tanto moralizante. Pero, lo dicho: una pizca de espontaneidad y libertad creadora permanece, como permanece también el gran trabajo de los acto res, con un sobrio, soberbio Richard Burton en cabeza, a los que se aconseja oír en versión original vía RCE.
Mirando hacia atrás con ira. A las 22.35 por TVE-1
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