Tres goles de Robinson eliminaron al Castilla

Osasuna resolvió en cinco minutos su eliminatoria con el Castilla con dos acciones inspiradas de su ariete británico Robinson (Robin-gol), que marcó los tres tantos navarros. Antes, el equipo de Pedro María Zabalza no aclaró sus ideas frente a un Castilla que creó mejores oportunidades pero jugó claramente en busca del empate y de la suerte final de la prórroga y los penaltis.El gol de Hurtado puso el acento de emoción, pero nadamás. El 2-1 hacía ya bueno el empate sin goles del Bemabéu y significaba el pase de Osasuna a las semifinales de Copa por tercera vez en su historia. Otro afortunado remate de Robinson lo confirmó.

Con velocidad, ritmo y mayor presión de Osasuna, el Castilla creó en la primera media hora las mejores ocasiones de gol. Se mostró muy ordenado en la defensa y contragolpeó con rapidez y relativo peligro.

Osasuna sólo amagó en dos disparos iniciales de Bustingorriy Goicoechea, y otro más a bocajarro de Rípodas detenido por Canales. El primero salió alto y el otro fue controlado por Canales. A los 31 minutos, sin embargo, Castafieda tuvo que agarrar de la manga de la camiseta a Guillermo y derribarlo en falta cercana al área, para que no se fuera solo hacia el gol.

Pero en el segundo tiempo, mientras el Castilla nadaba y guardaba la ropa, Osasuna planteó un estéril empuje hasta que pintaron oros en dos remates inspirados de Robinson. El tercero acabó con las últimas esperanzas de un Castilla que después de haber eliminado a dos primeras, uno de ellos el Athlétic de Bilbao, equipo con gran tradición copera, no pudo frente a Osasuna.

El Castilla, con trabajo de conjunto y destellos de clase a cargo de Aldana, fue anoche excesivamente conservador.