El Gobierno no quiere una comisión que vigile el tráfico de influencias

El Gobierno se opone a la creación de una comisión parlamentaria para "vigilar el tráfico de influencias" de ex altos cargos de la Administración, que ha sido propuesta por el Grupo Popular. Un miembro del Gobierno comentó que el tráfico de influencias no es una figura delictiva concreta, y las actividades de una comisión como la descrita no harían otra cosa que arrojar sospechas generalizadas de corrupción.El Ejecutivo está dispuesto, por el contrarío, a estudiar la aplicación de la ley de incompatibilidades a los altos cargos de la Administragión desde el año 1977, según informó el presidente del Grupo Parlamentario Socialista, Eduardo Martín Toval, quien se mostró Convencido de la honestidad, en general, de toda la clase política española.

El portavoz parlamentario del PSOE recalcó la necesidad de extender cualquier estudio sobre estos temas a todo el período democrático y no sólo al de gestión socialista. Página 12