Hungría y la RDA, primeros países socialistas que confirman su participación en Seúl

Hungría y la República Democrática Alemana confirmaron ayer al Comité Olímpico Internacional (COI) su participación en los próximos Juegos de Seúl, que se celebrarán del 17 de septiembre al 2 de octubre de 1988. Se trata de los dos primeros países de la órbita socialista que aceptan la invitación hecha el pasado 17 de septiembre, un año antes de la apertura por el COI, organismo dueño de los Juegos Olímpicos, que los otorga cada cuatro años a una ciudad. En medio de conflicto, aún sin resolver, de la coorganización de los JJ 00 por parte de las dos Coreas, esta confirmación es ya un primer paso positivo. El plazo límite de inscripción finaliza el 17 de enero.

El hecho de que los países confirmen su participación en los juegos es únicamente una decisión protocolaria, aunque en este caso, con la deteriorada situación política y deportiva coreana, significa un salto cualitativo importante. En los pasados juegos de Los Ángeles, sin embargo, confirmaron su participación todos los países socialistas y se volvieron atrás apenas das meses antes de la cita californiana.El COI, en esta ocasión, tendrá una defensa deportiva que ha preparado contra las decisiones políticas que se le escapan. En la asamblea del COI, que se celebrará en Calgary (Canadá), en febrero, antes de P)s juegos de Invierno, se aprobará muy probablemente un artículo de castigo contra los comités olímpicos que después de inscribirse en los juegos no participen. La sanción puede ser la prohibición de estar en las dos citas olímpicas siguientes. Samaranch, ante la imposibilidad Je encontrar una defensa política consistente para el inerme ante las decisiones de las grandes potencias en el último momento, ha optado por una sanción casera que amenace, al menos, un posible cuarto boicoteo, tras Montreal 76, Moscú 80 y Los Ángeles 84.

Hungría ha sido el primer país socialista que afirma querer participar en Seúl tras muchas semanas de dudas, que aún se mantienen en la mayoría de naciones de su órbita. El vicepresidente del Comité Olímpico Húngaro (HOC), Tamas Ajan, envió a las 10.35 de la mañana de ayer, desde Budapest, un fax al presidente del COI, Juan Antonio Samaranch, en el que decía textualmente: "Tengo el gran placer de anticiparle, en una nota del HOC, debidamente firmada por el presidente la confirmación oficial de nuestra participación en los Juegos ol de la XXIV Olimpiada en Seúl. Deseo informarle que esta decisión expresa el sentir de toda Hungría y de este modo transmite su apoyo total.El original de la confirmación se envía por correo hoy".Samaranch

Samaranch fue informado telefónicamente tras la reunión que mantuvo ayer, en Madrid, con Felipe González, sobre asuntos relacionados con La Caixa, entidad de la que es presidente y, de forma tangencial, sobre los juegos de Barcelona 92 y de Seúl 88. También conversó con el ministro de Economía y Hacienda, Carlos Solchaga. El presidente del COI, que regresó por la tarde a Lausana (Suiza), mostró su satisfacción al cumplirse una inscripción que esperaba y que abre las restantes de la órbita socialista. Samaranch mantiene y aumenta así su obligado optimismo de que no se producirá un nuevo boicoteo, pero sobre el futuro, siempre incierto hasta el último momento, dice: "Maniobrando".

El HOC, que tomó la decisión deportiva por unanimidad, según señaló un miembro del comité húngaro, anunció en un comunicado que apoya "todos los esfuerzos para facilitar una organización conjunta de los juegos entre las dos Coreas" Í La contestación de Hungría al COI era inminente tras la decisión del gobierno de dar la luz verde en la segunda quincena del pasado mes de noviembre.

En cuanto a la RDA, un portavoz del comité olímpico nacional dijo hace unos días que la decisión se tomaría "a su debido tiempo". Ya estaba tomada tras una reunión de finales de noviembre con el líder del país, Erich Honecker. El tiempo fue ayer por la tarde, por medio de un télex. El comité olímpico alemán oriental, al anunciar su decisión en Berlín Este, hizo hincapié igualmente en la coorganización de las dos Coreas y se mostró especialmente positivo al mostrar su esperanza de que "estos juegos contribuirán a la unidad del movimiento olímpico, a la comprensión entre los pueblos y a salvaguardar la paz mundial sobre la base de los principios de la Carta Olímpica", el gran reglamento olímpico.