Jadijetu Mint Ahmed

La mujer en Mauritania, el país geográficamente más occidental del mundo árabe, es libre y manda. Por ello nadie se sorprendió cuando el pasado mes de mayo se anunció el nombramiento de madame Abderrahm, de soltera Jadijetu Mint Ahmed, como ministra de Industria y Minas de su país. A sus 33 años, Jadijetu no sólo es una de las pocas mujeres que accede al Gobierno de un país árabe, sino también la más joven.

Pese a que Mauritania es un país pobre y que carece de una industria nacional desarrollada, sus principales recursos son la pesca y el minera¡ de hierro que se extrae del importante yacimiento de Zuerat. De Jadijetu, la mujer con mayor responsabilidad política en un país árabe, depende ese 50% de su producción propia y también todos aquellos productos, aunque escasos, que llevan en su etiquetado la marca de la República Islámica de Mauritania.La promoción de esta joven mauritana al Gobierno es obra del jefe del Estado, coronel Mauia Uld Taya, que accedió al poder hace ahora tres años y que se trazó como meta la integración de la mujer en los distintos niveles de producción y participación del país. Hoy madame Adberrahm constituye una doble excepción: la de ser mujer y la de no ser militar en un Gobierno constituido casi exclusivamente por tenientes, coroneles y comandantes.

El periódico de Nuakchot Chaab (Pueblo), el único del país, abría su edición el 1 de diciembre pasado con una amplia fotografía no muy frecuente en un Estado árabe: Jadijetu, sentada en un sillón giratorio y ante una amplia mesa de trabajo, presidía una reunión de ingenieros y geólogos que, atenta y fijamente, escuchaban sus palabras. El fotógrafo que cubrió la información comentaba después a este corresponsal: "Allí nadie abrió la boca, salvo la señora".

Jadijetu llegó al Gobierno tras una meteórica carrera en el Banco Central de su país. Con 24 años era ya jefa de servicio y con 26 directora de estudios económicos. Después ocupó la dirección de la balanza de pagos, y fechas antes a su nombramiento como ministra, la dirección de créditos.

Casada y madre de dos hijos, la ministra de Industria y Minas de Mauritania es licenciada en Ciencias Económicas por la universidad Mohamed V de Rabat (Marruecos); nació en Butilimit, a 150 kilómetros al este de Nuakehot, y su nombramiento como miembro del Gobierno ha revolucionado el protocolo. Ahora en Mauritania, cuando alguien se tiene que dirigir en público al Gobierno, se ve obligado a comenzar con estas palabras: "Señora, señores ministros...".