Jesus Gil estudía una oferta de Italia para traspasar al portuqués Futre por 1.500 millones de pesetas

El presidente del Atlético de Madrid, Jesús Gil, estudia una oferta de un club italiano y podría vender a Paulo Futre antes de que termine la temporada por una cantidad entre 1.000 y 1.500 millones de pesetas. Gil, que afirmó ayer estar "muy cansado" por todos los problemas que, según él, le están creando quienes buscan su "acoso y derribo" así como por "la falta de apoyo" de los seguidores del club, dijo: "No puedo estar financiando un equipo de estrellas sin que nadie quiera mojarse. Que no me calienten". Gil arremetió también con unas duras declaraciones contra Mariano Rubio, gobernador del Banco de España

El dirigente rojiblanco se mostró muy apesadumbrado en sus manifestaciones a este periódico antes del Atlético-Elche, de la Copa del Rey: "Mis esfuerzos no encuentran eco ni entre aquéllos que dicen ser hinchas de este equipo". En este sentido, indicó: "Me están cansando. Estoy cansado y este fin de semana voy a meditar mucho. No quiero vender ni a Futre ni a nadie, pero, entre las zancadillas que me han tratado de poner algunos en estos cinco meses y la falta de apoyo de otros, voy a meditar muy bien lo que hago. Y ahora mismo sólo hay dos jugadores cotizados por encima de los 1.000 millones de pesetas que interesan al fútbol italiano. Uno es Futre y otro, y no me duelen prendas reconocerlo, el madridista Michel".

"El segundo Ruiz-Mateos"

Por otro lado, Gil afirmó ayer a Efe: "Mariano Rubio, gobernador del Banco de España, ha hecho de mí su segundo Ruiz-Mateos y es la persona que está colapsando todas mis operaciones financieras y de crédito". Gil, al que se le ha negado recientemente un crédito de 200 millones de pesetas por parte del Banco de Fomento del grupo del Banco Central, reconoció por primera vez las dificultades que encuentra para financiar sus operaciones con los bancos. El presidente del Atlético dijo que incluso el Hispano Americano, la entidad con la que habitualmente trabaja, le ha puesto problemas."Cada vez que pido un crédito, Mariano Rubio hace lo posible para que no me sea concedido" dijo Gil, que agregó: "Es el hombre que más daño me ha hecho en los últimos 10 años. Su influencia llega también a los medios de comunicación. Domina el Grupo 16 y ha intentado cerrarme las puertas de bastantes medios de comunicación, como me ha hecho con los bancos".

En el descanso del partido, Gil insistió en sus ataques al gobemador del Banco de España: "Es el cáncer de la economía, acostumbrado a cambiar presidentes de bancos. Pero a mí no me va a echar del país. En todo caso, seré yo quien le eche. Y ya es hora de que se sepan todos los chanchullos con los 27.000 millones de Galerías".

La publicidad estática

Gil mantuvo ayer la publicidad estática contratada con la empresa Artes y Espectáculos, pese a la reciente sentencia de un juez dando la razón a la firma Ralco, a la que Gil rescindió el contrato, y a que esta última requirió ayer mismo notarialmente a aquélla comunicando el fallo. Gil lo ha recurrido.Con respecto a la querella criminal contra los ex directivos del Atlético que el titular del Juzgado de Instrucción número 29 de Madrid ha sobreseído, Gil comentó: "Estoy muy satisfecho de ello. Ahora he comprendido que retener las cuotas de los obreros no es delito, por lo que yo voy a hacer lo mismo". La querella sobreseída se refería a una supuesta apropiación indebida de la retención del impuesto de la renta sobre las personas fisicas (IRPF) de los empleados del club relativa al segundo trimestre de 1986.

Javier Castedó, ex vicepresidente, dijo: "El juez nos ha proporcionado la tranquilidad legal sobre la moral, que ya teníamos, porque en ningún momento se produjo infracción. Lo que hizo el club fue declarar, reconocer la deuda y pactar con Hacienda un aplazamiento del pago".

Gil señaló que tenía preparados para la firma unos pagos a Hacienda, correspondientes a las retenciones por concepto del IRPF de los empleados del club. "Pero, como ya no es delito", dijo, "no voy a firmar nada". Gil añadió: "Voy a recurrir por recurrir, pero, en el fondo, me ha hecho un gran favor el juez".