La televisión catalana califica de "represalia" el acuerdo Barcelona-TVE

Joan Granados, director general de la Corporación Catalana de Radio y Televisión (CCRTV), calificó ayer como "un acto de represalia contra TV-3" el contrato firmado entre el Barcelona y TVE para la retransmisión de los partidos de la Copa de Europa de baloncesto que se jueguen en el Palau Blaugrana. Según Granados, la causa de esta represalia es que "TV-3 se permitió organizar un debate sobre la crisis del Barça que al señor Núñez [presidente del Barcelona] no le gustó". Estas declaraciones fueron realizadas en una conferencia de prensa en la que TV-3 anunció que posee los derechos televisivos de seis de los siete partidos que el Barcelona jugará en campo contrario en la Copa de Europa de baloncesto.

Granados hizo una introducción política en la que explicó la postura oficial de TV-3 respecto a la actitud de la directiva de Josep Lluís Núñez. "TV-3", dijo, .continuará con su política informativa sin admitir el estilo Núñez que pretende poner condicionamientos a la libertad de expresión, algo muy grave". Granados apuntó como incuestionable que la firma del contrato entre TVE y el Barça fue una represalia por el debate sobre la crisis del club azulgrana, emitido el pasado 6 de noviembre y en el que intervinieron Joan Gaspart, vicepresidente del Barça, y los periodistas José María García y Xavier Domingo. "El contrato para la Copa de Europa de baloncesto estaba prácticamente negociado, con unas condiciones económicas superiores a las que ofrecía TVE. Está claro que la decisión ha creado tensiones en el seno del Barça y en personas próximas a Núñez", dijo Granados, refiriéndose a la dimisión presentada por Josep María Gené, asesor de imagen de Núñez.

Tatxo Benet, jefe de deportes. de TV-3, explicó que, tres días después de emitirse el debate, había recibido una llamada de un portavoz oficial del Barcelona en la que le dijo que "se pasaba a negociar con TVE porque el debate no había gustado a la junta". Granados reconoció que a Núñez tampoco le gustó el acuerdo con la Liga Profesional.

Enric Canals, director de TV-3, negó que existiese algún tipo de precedente de presiones de la directiva del Barcelona y desmintió que a un redactor se le hubiese abierto un expediente por recoger la opinión crítica de un aficionado en el programa Gol a gol.

Los dirigentes de TV-3 explicaron a continuación: "Nuestros espectadores pueden estar tranquilos porque, pese al contrato con TVE, hemos trabajado muy bien para seguir ofreciéndoles lo mejor del Barcelona". Granados añadió: "Y quiero apuntar que la conducta de TVE nos parece un acto de competencia leal".

En una nota oficial, TV-3 anunció que poseía los derechos de seis de los siete partidos de la Copa de Europa de baloncesto que el Barcelona jugará en campo contrario, contra Maccabi de Tel Aviv (26-XI-87), Satur de Colonia (10-XII), Orthez de Francia (20-1-88), Aris de Salónica (1841), Partizán de Be1grado (MII) y Nashua de Den Bosch (9-111). TV-3 ha comprado los derechos a los clubes respectivos. Un portavoz de TVE manifestó ayer que los derechos de estos encuentros les pertenecían a ellos -excepto el de Tel Aviv-, según télex de las televisiones.

Además, y completando la oferta del Barcelona, TV-3 afirmó tener los derechos del partido de vuelta de la tercera ronda de la Copa de la UEFA que se jugará en Albania ante el Flamurtari (9-XII), además de los encuentros de la Liga de fútbol ya pactados con anterioridad: Betis-Barça (21-XI), Atlético de MadridBarga (28-11), Barça-Real Madrid (30-1V), Barça-Osasuna (231) y Valencia-Barça (2041).

Asimismo, los responsables del canal autonómico criticaron el espíritu económico del acuerdo entre TVE y el Barcelona: "Nosotros les ofrecíamos 200 millones de pesetas por dos años; ellos rebajaron su petición a 100 millones por esta temporada. Al final, han vendido el paquete de partidos a TVE por 100 millones. Consideramos que el Barça ha negociado a la baja porque TVE consigue un beneficio publicitario muy superior al que podría lograr TV-3". Según fuentes de TV-3, TVE puede llegar a ganar hasta 1.000 millones por el paquete del acuerdo -en el que se incluyen partidos de la Copa de la UEFA y del Trofeo Gamper- al tener una audiencia potencial de 30 millones de personas.