Papel y dinero más equilibrados

El proceso vendedor está chocando de lleno con la oposición de un dinero empeñado en tomar posiciones a cualquier precio, lo que no ha conseguido impedir que el resultado global de la sesión haya sido negativo. El ambiente del mercado es sumamente irregular y la tendencia cambia de corro a corro, pues cada valor parece moverse por su propio impulso o el de sus cuidadores, según cada caso. Las ampliaciones de capital parecen entrar en un proceso de desgaste, con las cotizaciones de los cupones descendiendo a pesar del empeño que se pone en algunos casos para que no sea así. El volumen negociado en derechos de suscripción ha descendido en más de un 25% en sólo tres días, después de que el inicio de las ampliaciones de las sociedades eléctricas empujase al alza el precio de las acciones en circulación.El sector bancario se ha mantenido bajo la presión del papel, haciendo gala de su tradicional resistencia a la baja. Sólo uno de los ocho grandes registró un descenso importante, lo que le sirvió para atraer al dinero inmediatamente. Esta situación se viene repitiendo an la mayor parte de los grupos, tanto al alza como a la baja, pues también las subidas atraen con fuerza al papel.

Los altibajos de los valores industriales son los que más interesan a la barandilla, tal vez el dinero más dinámico, hasta el punto de que son estos corros los que mayor cantidad de público reúnen a su alrededor. Las anécdotas no faltan en un mercado en el que la especulación es una constante y, en general, se dan en la contratación de cupones. Los de Unión Cervecera habían estado subiendo en posición de dinero, es decir, con una demanda muy fuerte, hasta alcanzar las 17.500 pesetas, para ver como ayer caía el precio hasta las 6.500. Un cierre discretamente entonado permitía centrar toda la atención en las perspectivas de un cierre semanal muy comprometido.